CD ARRECIFE; maltratado, denostado e incluso despreciado con el paso del viejo y eterno tiempo, pero aún con todo cumple cinco hermosas décadas incluyendo por méritos propios su capitalino nombre en la historia de nuestro fútbol insular.
Las actuales penurias y miserias que "maneja" el CD ARRECIFE engrandecen aún más si cabe su supervivencia en las coloridas ligas de esta santa isla de Lanzarote, con el mérito añadido de ser equipo de la capital , lo que supone recibir aportaciones económicas de las instituciones públicas poco menos que vergonzantes.
Sin sede social conocida, hoy por hoy los valientes héroes que manejan el cotarro de este vetusto club, se las ingenian no se sabe de que manera para no faltar a las obligadas citas con las ligas futboleras lanzaroteñas.
Antiguos jugadores despliegan cada temporada la "VELA MAYOR" del CD ARRECIFE aportando sus tiempos y ganas de manera incansable para que ninguna circunstancia extradeportiva acabe de un plumazo con la existencia de este ya cincuentenario club.
Y es que por éste ya han pasado jugadores y entrenadores que han hecho su particular historia y que a su vez han marcado bonitas páginas en la trayectoria del CD ARRECIFE.
Atrás en el tiempo, quizás muy atrás, queda la presidencia de su "ALMA PATER" en la figura de Patrocinio Barambio, el cual con su inestimable ayuda contribuyó y de qué manera, a que aquel equipo brillase con luz propia no sólo en Lanzarote, sino en toda la Provincia de Las Palmas.
La pérdida de su sede social en la calle Pérez Galdós, aunque esperado, supuso un duro golpe a la gran familia del CD ARRECIFE que casi como indigentes mendigaron un local para poder seguir desarrollando esa impagable labor de "RECIBIR" con los brazo abiertos a todos los jóvenes, con la única y sana intención de jugar al fútbol, vamos de hacer deporte.
Éste pasado 27 de diciembre en el centro sociocultural de Valterra, el CD ARRECIFE pregonó y celebró sus 50 años, sus 50 temporadas. Por allí se congregaron los que de una manera u otra siempre han querido o aportado a este club, recordando anécdotas y vivencias de años atrás, en definitiva pasando unos momentos distendidos.
El merecidísimo reconocimiento a Antonio Gutiérrez Tejera nombrándolo Presidente de Honor fue simplemente la guinda de un acto que debe servir como punto de inflexión para que la trayectoria del CD ARRECIFE no decaiga un ápice.
Marcial Cedrés, su actual mandamás, tendrá mucho que ver en ello.