Los Cabildos de Lanzarote y Fuerteventura y el Gobierno de Canarias, se han dirigido en las últimas semanas en distintas ocasiones al Gobierno de España para reclamar explicaciones e información detallada sobre la situación real de las operaciones de perforación que la petrolera acomete en la apertura del pozo Sandía, a 55 kilómetros de las costas de las citadas islas. Los últimos requerimientos tuvieron lugar en el día de ayer y en la jornada de hoy, en las que el Cabildo de Lanzarote reclamó a los Ministerios de Industria y de Medio Ambiente información precisa sobre el desarrollo de la cata, tras detectar que la petrolera no ha logrado superar en 18 días la cota de -3.000 metros. Las tres administraciones canarias han trasladado además al ejecutivo de Rajoy su preocupación por la total ausencia de información oficial sobre la evolución de este pozo, y de forma especial por el hecho de que Repsol ha publicado datos totalmente incorrectos sobre las maniobras de perforación y sobre las profundidades que, conociendo los miles de derrames de esta petrolera en otros lugares del mundo, inducen a la confusión y a la alarma. Analizando día a día los datos reflejados por la Repsol en su propia web, las administraciones canarias constatan una vez más que la información de la petrolera responde a las mismas connotaciones publicitarias y carentes de responsabilidad, credibilidad y rigor que manifiesta en este asunto desde que comenzara su propósito minero en las islas hace catorce años.
Atendiendo a los datos reflejados en la página digital de Repsol *, se observa que Repsol ha emitido un total de 11 partes informativos desde el día 14 de noviembre hasta hoy 8 de enero, si bien el último comunicado, fechado el 29 de diciembre, fue en realidad colgado el 2 de enero de 2015. En relación a las profundidades, el parte del 19 de diciembre señalaba que la perforación había alcanzado los 2.756 metros de un total de 3.170 metros que tiene autorizado la multinacional para este pozo. Sin embargo, la nota que la petrolera cuelga en su web con fecha de 29 de diciembre especifica que la profundidad alcanzada es en realidad de 2.740 metros, o sea, 16 metros menos que los supuestamente alcanzados diez días antes. Una semana más tarde, el 4 de enero, Repsol confirma que aún no ha superado los 3.000 metros, un dato que no se corresponde ni con el ritmo de perforación que tuvo desde su inicio (con una media de 89 metros diarios) ni con los protocolos de perforación temporal habituales en esta industria.
Literalmente, los últimos dos partes de Repsol publicados en su web sobre esta prospección, especifican:
19 de diciembre: Se ha finalizado la fase de perforación 12- ¼ alcanzándose una profundidad media de 2.756 metros.
29 de diciembre: Se han realizado con resultados satisfactorio las pruebas del sistema de control de presión y del BOP y posteriormente se ha perforado hasta una profundidad de 2.740 metros.
http://www.repsol.com/es_es/corporacion/prensa/publicaciones/especial-canarias/documentacion/default.aspx
Asimismo, las administraciones canarias han remitido esta mañana dos nuevas solicitudes reclamando datos precisos sobre esta cata al Ministerio de Energía, Industria y Turismo, y ayer a la Dirección General de Medio Ambiente de la Comisión Europea. En sendos documentos se refleja la situación de vulnerabilidad de la sociedad canaria frente a las operaciones mineras no solo por la imposición de las mismas, sino por la ausencia absoluta de información veraz desde que comenzaron el 14 de noviembre de 2015. Entre las informaciones reclamadas a las administraciones citadas, se citan todos los informes relativos a cetáceos elaborados por los observadores especializados en cetáceos (MMO´s), desde el primer día de trabajo y hasta la fecha de hoy, indicando los detalles de todos los avistamientos, las valoraciones de los científicos, la confirmación de que éstos hayan estado presentes de forma ininterrumpida junto al Rowan Renaissance desde el primer día, el número de científicos contratados, y las entidades científicas a las que pertenecen.
Los Cabildos canarios y el Gobierno Autónomo denuncian que ni siquiera para la labor de seguimiento ambiental se hayan contratado a observadores científicos canarios. Se recuerda queRepsol anunció en 2012 que las prospecciones podrían generar 52.000 empleos en las islas, cifra que pasó a 5.000 posteriormente, más tarde a 3.500, y ahora que concluye la primera prospección, la petrolera afirma que ha generado 40 puestos de trabajo vinculados a la actividad portuaria. La práctica totalidad de los trabajadores que operan en el barco petrolero y en los barcos de apoyo son extranjeros, así como la nacionalidad de las embarcaciones que todas ostentan pabellón extranjero. En el caso del Rowan, la bandera es de las Islas Marshall, paraíso fiscal vinculado directamente a Repsol.
Los Cabildos y el Ejecutivo canario han reclamado además toda la información pública disponible sobre tipos de medición y resultados en torno a los ripios y lodos tóxicos que la perforación haya depositado sobre el lecho marino, así como sobre la extensión radial que éstos han podido alcanzar a partir de la cabeza del pozo. La información solicitada abarca datos sobre niveles de presión sonora de las operaciones, y sobre resultados de las analíticas efectuadas en el periodo pre-operacional sobre la columna de agua y sobre el sedimento de lodos, incluyendo, como establece la Declaración de Impacto Ambiental publicada en el BOE del 10 de junio, los efectos sobre organismos bentónicos.