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Juan Francisco Ramírez

Grecia, y la Europa de las miserias

Abogado, investigador y analista polítco

Juan Francisco Ramírez | 04 de julio de 2015

 

El gran sueño europeo, ha resultado una gran pesadilla de terror, de la que de manera abrupta  han comenzado a despertar los ingenuos creyentes; pues, jamás estuvo en la mente de sus ideólogos una Europa de las corporaciones. Ni que los niños tuviesen carencia alimentaria.

Los grandes pensadores que soñaban con una gran unidad de los países occidentales europeos (Richard Coudenhove-Kalergi, fundador del movimiento Pan-Europa;  Arístides Briand, Jean Monnent, Alcide De Gasperi, Robert Schuman, Ortega y Gasset, Salvador de Madariaga, etc.), jamás pensaron otra cosa, respecto a la europeidad, que no fuera la unidad de los pueblos y sus gentes, a fin de favorecer una mejor y más pacífica convivencia; tratando de eludir o evitar, sobre todo, los horrores de las dos grandes guerras. No obstante, los precedentes de la unidad europea, es decir, la búsqueda de una unidad de naciones, sería buscada por la Roma Imperial; posteriormente, en la Edad Media se  intentaría la unidad de los estados medievales europeos bajo el manto del cristianismo, de ahí emanaría la idea del eurocentrismo y de la superioridad de la civilización europea occidental.

La idea de la unidad de las naciones europeas occidentales, confederación de naciones, para el bien común de los pueblos europeos; sin duda alguna, no la encontraremos en una Europa defensora de las grandes corporaciones del capital, pues no resulta de utilidad al común de los ciudadanos europeos. Europa, sería grande sí no se entregase a los mercaderes; las naciones, no pueden ser manejadas como de una mercancía se tratasen.

 ¿Es posible, lo que ha costado tantos esfuerzos y siglos, a los ciudadanos europeos, para conseguir unos pocos avances de libertades y derechos sociales puedan haberse entregado, hoy, de manera tan miserable, por parte de aquellos a los que se supone han sido puestos en las instituciones de poder, por sus respectivos conciudadanos, para defender los derechos logrados con sudor, sangre y lagrimas durante siglos? La respuesta, categóricamente debe ser ¡SI!, pues todo aquello que se ha logrado con esfuerzo y dificultades múltiples pronto se pierde;  ya que, para poder conservar los logros sociales alcanzados tenemos, todos, que reivindicarlos cada día, para su sostén continuado en el tiempo, de lo contrario son fácilmente hurtados; ello, no es tan sólo un mandato sino una obligación, debida a los que nos los han entregado este preciado legado, con sus esfuerzos. No olvidemos, que tan sólo somos meros poseedores temporales de lo que nos han transmitido nuestros predecesores, e igualmente estamos obligados a transmitir a nuestros sucesores.

Cómo puede un sistema democrático tolerar que instituciones no electas (Comisión, BCE, y FMI) dicten o impongan la política a implementar en los diferentes países que conforman la Unión Europea. ¿Acaso, pueden creer que los estados nación, son un objeto medible o cuantificable en valor moneda, cual de mera mercancía se tratase? Probablemente; muchos crean así es, pero hay que decirles con total certeza, que están imbuidos de un tremendo error; los países, a lo largo de la historia del Mundo, han sido algo mucho más que dinero; por más que la moneda sea un bien fungible, por ello fácilmente cambiable.

No debemos olvidar, que no ha mucho existió una época en la cual el valor de la moneda de los países se media en función de sus reservas en oro, establecida en la célebre Conferencia de Bretton Woods (junio de 1944); sistema de paridad establecido a 35 dólares la onza;  tal cosa, cambiaria bajo la presidencia de Richard Nixon, que decidió abolirlo en 1971, y finalmente declarando en 1973 su finalización; por cierto, no aconteció ninguna tragedia.

Una de las grandes contradicciones o paradojas del Banco Central Europeo, consiste en la prohibición de prestarle dinero a los países miembros; en cambio, aquí la paradoja, prestan a la banca privada de los diferentes países, a un interés muy bajo, para posteriormente, éstos se lo presten a sus países a un tipo mucho más alto, ganado un importante corretaje o interés.

Hoy, estamos asistiendo a la destrucción del sistema democrático; nos referiremos al caso de Grecia, cuna de la democracia. Ello, nos trae a la historia, la batalla de las Termopilas, la cual sostuvieron los griegos contra la invasión de los persas; un puñado de combatientes íntegros, honestos y dueños de sus aciertos y errores, pero soberanos de sus decisiones políticas y, por tanto, de su dignidad como pueblo; siglos atrás, lucharían enfrentándose a un enemigo poderoso que les superaba en número y quería convertirlos en siervos del por entonces Rey de Persia, el gran Jerges I (485 – 465 a. C.); además de ser traicionados por los propios; lo cual resulta más doloroso, incluso, que las heridas del combate frontal.

Los griegos; al igual que sus antepasados, hoy, enfrentan un enemigo poderoso, es decir, las corporaciones transnacionales del capital mundial, que trata de aprovechar el miedo de una parte del pueblo, que creen no existe vida fuera del EUR., pero es al revés, no existe vida digna dentro del EUR. Es impresionante, el poder de muchos medios de comunicación, pues han hecho olvidar al pueblo heleno que vivían con moneda propia, el dracma; no pasaría nada por retornar, nuevamente, al dracma; es más, recuperarían no sólo su estima como pueblo, volverían a ser soberanos de sus propias destinos, cosa que hoy no son. (1)

¡Tildemos de traidores, ágrafos y olvidadizos a los dirigentes sociales, vecinales, estudiantiles, intelectuales iletrados, políticos de tres a cuatro horas día, que han utilizado a sus congéneres para estar en el poder y, luego si te he visto no me acuerdo; sindicalistas pancistas; senadores de comedor; diputados cortesanos; banqueros de explotación; jueces y funcionarios de clases; abogados de orquesta; procuradores de ida y vuelta; médicos de don; comunicadores iconoclastas; partidos políticos partitocráticos; políticos de incuria; republicanos cortesanos; enterradores de la verdad y, cómo no, los ciudadanos olvidadizos de su condición que se alían al contrario; todos, cómplices de la actual miseria humana en la que estamos sumidos por ignaros, timoratos, ingenuos, estómagos agradecidos, violadores de ideologías, trepas de ocho a veinte, corruptos de despacho y festejos de sofás; gente de mal gusto, adictos a la estulticia y la zafiedad; trapicheros del mal; mercachifles; titiriteros de opereta; todos, siervos adoradores de Moloc. Por supuesto, quede salva las honrosas excepciones, que, confirman la regla.

Entre todos los autodenominados “progres de boquilla”, existen los que, cual Esaú, han preferido vender, por un plato de lentejas (Génesis, Capítulo 25.33), su legado. Resulta triste, que la lucha y el sacrificio de generaciones pasadas estén, literalmente, encaminados al abismo del olvido; mas, el oráculo de Delfos, augurará lamentos a los que toquen cargar con tamaño desatino.

El próximo domingo 05 de julio de 2015, los griegos decidirán, democráticamente, sobre su destino; esperemos y deseemos, por el bien de todos, que Grecia, cuna de la democracia, sea capaz de recuperar su soberanía política, económica y social; de lo contrario, terminará convertida en una mercancía más a manos de la Corporatocracia.

¡Ojalá, el pueblo griego no reviva el error de condenar al sabio Sócrates a tomar la cicuta!

 

Juan Fco. Ramírez S. (Abogado – Analista político)

(Las Palmas de G. C., 12/02/ 2012 – Modificado el 03/07/2015)

CITAS A CONSIDERAR:

-“La razón de la sinrazón es la que nos ha de llevar, nuevamente, a buscar la razón de la razón” (yo).

-“Toda la historia de la sociedad humana que conocemos, hasta la actualidad, es una historia de lucha de clases” (Karl Mark 1818-1883).

-“Nada es tan peligroso como la influencia de los intereses privados en los negocios públicos” (pág. 109), Jean Jaques Rousseau, El Contrato Social, Los grandes pensadores, Sarpe – Madrid 1983.-    

 

(1) DOCUMENTALES RECOMENDADOS:

a) Memoria del Saqueo”, director Fernando E. Solanas (Argentina 2004)

b) “La Corporación”, director Mark Achbar y Jeniffer Abbott (Canadá 2004)

c) “Guerra a la Democracia”, director John Pilger (2007)

c) “Debtocracy”, dirigida por Katerina Kitidi y Aris Chatzistefanou (Grecia 2011)

d)Catastroika”, directores: Idem Debtocracy (Grecia 2012)

 

Bibliografía citada:

-Víctor Hugo, Los miserables, (1862)

-Batalla de las Termópilas (480 a. C.)

 

Filmografía mencionada:

-Los 300 (Three Hundred), dirigida por Zack Snyder, EEUU – 2006

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