El fallecido (que no muerto) Antonio Cubillo, en las tantas entrevistas radiofónicas y televisivas que le hice, siempre decía que el verdadero Día de Canarias "será aquél en que nuestra sufrida Tierra consiga la Independencia". Rechazando con ello la celebración anual del mal llamado "día de la nacionalidad canaria", cuya fecha se centra principalmente en 2 vergonzosos hechos de la Historia de nuestro Archipiélago.
Por un lado se quiere conmemorar el aniversario de la primera sesión del Parlamento de Canarias (el 30 de mayo de 1983), exactamente 10 meses después de publicarse el Estatuto de Autonomía del Archipiélago en el BOE... Una falacia más, pues la mal llamada "autonomía" (capacidad de autogobierno y competencias específicas propias) no se ve por ningún lado: Canarias no tiene (ni siquiera un pellizco) su propia Hacienda; ni su Seguridad Social; ni sus aguas (islas sin siquiera las 12 millas de Mar Territorial propio); ni su espacio aéreo (explotado por la multinacional AENA); ni el control de sus riquezas (ni siquiera de su turismo); ni la capacidad de decidir en su territorio (la Ley de Costas lo deja bien claro); ni la explotación de su propia economía (siempre a remolque de Europa)... ¿Qué "autonomía" es ésta? Desde luego esa fecha no es el Día de Canarias, por lo que no tenemos nada que celebrar.
Peor aún. De forma encubierta se trata de celebrar aquel 30 de mayo de 1482 (según algunos cronistas), en que Thenesor Semidán le rindió pleitesía en Calatayud, al entonces rey de Aragón, Fernando (más tarde sería llamado "el católico"). Siendo bautizado el isleño como Fernando Guanarteme, contribuyendo en el futuro a la conquista y sometimiento de su tierra... De ser cierta esta afirmación, desde luego que la fecha no es tampoco el Día de Canarias, por lo que no tenemos nada que celebrar.
Por todo ello, y a falta de lo que aún está pendiente a nivel internacional, bueno es que el Día de Canarias sea una fecha que demuestre el valor y coraje de un pueblo que luchó contra los invasores durante 94 años para tratar de evitar ser sometidos... Como la de diciembre de 1483, en recuerdo del conocido como "desbarate de Ajodar", donde los guerrilleros alzados de Bentejuí despeñaron a 300 ballesteros vizcaínos mandados por Michel de Muxica, provocando la mayor derrota de las armas castellanas en su intento de conquista de Gran Canaria... O la del 26 de mayo, aniversario de la gloriosa Batalla de Asentejo (1494), en la que 300 pastores guanches comandados por el Mencey Bencomo aniquilaron a un ejército de 1.500 guerreros castellanos que habían desembarcado con la intención de conquistar Tenerife.
Y como éstas hay otras tantas fechas históricas (que algunos pretenden que olvidemos) que Canarias puede conmemorar con orgullo, porque ahí sí hay algo que celebrar...