El profesorado del Instituto de Haría ha sufrido un "ataque" a través de la Red Social "Twitter", presuntamente por parte de algunos de los alumnos del mismo. Esta es la segunda vez que el citado centro de enseñanza es investigado por supuesto "acoso en las redes", después de que en noviembre del pasado año la Guardia Civil remitiera a la Fiscalía "el acoso a un menor autista a través de Tuenti". En esta ocasión, el asunto ha sido puesto en conocimiento de las autoridades competentes, por si pudiera ser constitutivo de delito.
Según ha podido saber LA VERDAD DE LANZAROTE, "desde hace algunas semanas han comenzado a aparecer en twitter comentarios alusivos a los profesores del Instituto de Haría". Aunque algunos de ellos aparecen "firmados" con identificaciones ficticias, otros reflejan nombres "que corresponden" supuestamente con alumnos del centro. El malestar es tremendo en el profesorado, ya que algunos de esos comentarios "son claramente descalificadores y ofensivos hacia sus personas".
- Acoso a un menor autista
Ya en el pasado mes de noviembre, los padres de un menor autista denunciaron en el Cuartel de la Guardia Civil de Costa Teguise, que su hijo, con Autismo Atípico, "había sido acosado a través de la red Tuenti, por otra alumna del instituto de Haría". La Benemérita abrió las oportunas diligencias, remitiéndolas a la Fiscalía de Menores por un posible Delito de Vejaciones Leves, ya que "la alumna confesó los hechos". A las diligencias se aportaron "dos fotografías de la pantalla del perfil de la menor responsable, con varios comentarios". Según denunciaron los padres, "la niña sacó una foto a su hijo autista, en el interior del Aula de Pedagogía Terapéutica, mientras hacía sus deberes", colgándola luego en la red "con una serie de comentarios inapropiados, que provocaron que otros usuarios hicieran los suyos, algunos en plan burlesco".
En ese momento, los padres denunciaron "la actitud ambigua del Director del centro", Enrique Pérez Coll, que si bien expulsó "cautelar y temporalmente" a la menor confesa, luego trató de "quitarle hierro al asunto". ¡Hasta ahora!