Fue un ciudadano que se encontraba en la zona quién observó a varias personas "mirando en varios agujeros y grietas" de la zona litoral de Charco del Palo (costa de Mala), de forma sospechosa, por lo que avisó seguidamente a la Guardia Civil. Y una vez que los agentes del instituto armado se personaron en la zona, observaron a "dos adultos y un menor de edad junto a un vehículo", quienes aseguraron que "se hallaban con intenciones de practicar la pesca".
Sin embargo, los agentes observaron que carecían de útiles de pesca, sino que portaban un cesto para transportar hurones y un saco de tela de color marrón vacío, por lo que se procedió a su identificación, para seguidamente inspeccionar la zona. Encontrándose a escasos metros del vehículo una cuerda atada a una roca, que se introducía en una oquedad en el acantilado.
En el interior de la oquedad se halló atado al otro extremo de la cuerda a un hurón y un ejemplar joven de una pardela cenicienta viva; también localizaron otro saco de color marrón que contenía en su interior cuatro cadáveres de ejemplares jóvenes de pardela cenicienta; reconociendo inmediatamente las personas referidas – vecinos del municipio de Tinajo- que estaban cazando pardelas, auxiliados del hurón, por lo que fueron inmediatamente detenidos como supuestos autores de un delito relativo a la protección de la flora y la fauna.
Los cadáveres de pardelas fueron entregados en el área correspondiente del Cabildo de Lanzarote, recabándose los oportunos informes técnicos para unirlos las oportunas diligencias policiales; por su parte el hurón fue depositado en instalaciones municipales de Teguise y la pardela viva fue devuelta a su respectivo nido.
La pardela cenicienta (Calonectris diomedea boreales) figura en la Relación de especies incluidas en el Listado de Especies en Régimen de Protección Especial, y del Catálogo Español de Especies Amenazadas, no figurando como especie cinegética en la normativa española.
Artículo 332 del Código Penal
El Código Penal castiga las conductas descritas en el tipo penal con penas de seis meses a dos años de prisión o multa de ocho a veinticuatro meses y, en todo caso, inhabilitación especial para profesión u oficio e inhabilitación especial para el ejercicio del derecho a cazar o pescar por tiempo de dos a cuatro años.
Los detenidos han quedado a disposición del correspondiente Juzgado, en funciones de guardia, de la localidad de Arrecife, quedando el menor de edad –hijo de uno de los detenidos- a disposición de la Fiscalía de Menores de Las Palmas. Las diligencias policiales realizadas por el SEPRONA quedarán a su vez a disposición de la Fiscalía de Medio Ambiente de Las Palmas.