Unidas Podemos en Lanzarote, confluencia estatal formada por Podemos e Izquierda Unida, muestra su apoyo y compromiso con los colectivos esenciales que han hecho posible que las primeras fases de la desescalada hayan sido superadas con éxito y responsabilidad.

Durante las medidas de confinamiento, las ciudadanas y ciudadanos de Lanzarote y La Graciosa cumplieron con madurez todas las recomendaciones sanitarias para contener la propagación del virus, siendo uno de los territorios con mejor evolución de todo el estado español.

Tras esto, y al comenzar con la desescalada, se abrían nuevos retos que comprometían aún más a los colectivos más vulnerables, siendo ellos precisamente quienes corren más riesgos de asumir los posibles errores de la comunidad. Por suerte, tras superar las dos primeras fases, Lanzarote y La Graciosa no tienen que lamentar ningún contratiempo de relevancia y ambas islas siguen subiendo escalones hacia la llamada nueva normalidad.

Los servicios esenciales como el sector sanitario, el personal de limpieza y desinfección, docentes y educadoras, el tercer sector, trabajadores y trabajadoras municipales, personal de supermercados y la distribución, entre otros colectivos, mostraron de igual forma una profesionalidad digna de ser reconocida.

“Tenemos que reconocer que la gran mayoría de la población de Lanzarote y La Graciosa ha actuado responsablemente y ha tomado las precauciones que estaban en su mano para que esta nueva etapa esté siendo un éxito”, reconocen desde la coalición.

“Además se ha dado un ejemplo de solidaridad desde las asociaciones y ONGs que se han volcado en atender a muchas familias a las que las ayudas les llegaban tarde o se habían quedado fuera de ellas por diferentes motivos. Estos gestos altruistas han sido el mejor ejemplo de la sociedad cohesionada y solidaria que aspiramos a ser”.

Manifestaciones de odio y vergüenza

Frente a la actuación ejemplar de la mayoría de la población de Lanzarote, La Graciosa y el personal de sus servicios públicos esenciales, se ha lanzado un triste mensaje de odio promovido por una minoría de privilegiados que, durante una mañana, han paseado sus contradicciones y banderas llenas de símbolos y consignas vacías, poniendo irresponsablemente en riesgo el éxito colectivo y la salud pública.

Lamentamos profundamente que la ciudadanía haya tenido que ver como conductas irresponsables puedan hacer peligrar el avance sanitario que tanto le costó conquistar después de dos meses sin ver a sus seres queridos y sin salir a disfrutar del aire libre.