Somos Lanzarote ha presentado una moción al Ayuntamiento de Arrecife y al Cabildo Insular solicitando que ambas instituciones inicien acciones para que el suelo ocupado actualmente por el acuartelamiento Marqués de Herrera, en la capital insular, tenga un uso público y civil. La organización transformadora confía en que el acuerdo de ambos organismos y el traslado de dicha reivindicación a las instituciones canarias y del Estado abra un debate público sobre un nuevo uso de este espacio estratégico, situado entre algunos de los barrios más populosos de la capital.
Desde Somos Lanzarote señalan que tras varios cambios en su uso defensivo, desde 2003 este espacio ha disminuido considerablemente tanto el número de efectivos como las operaciones propias, configurándose como una unidad de apoyo a las unidades de ejércitos que se desplacen a la isla para realizar ejercicios tácticos, disminuyendo por tanto su interés para el objeto par el que fue construido en la década de 1940.
“Paralelamente a la pérdida de importancia para la Defensa de este acuartelamiento, la ciudad de Arrecife ha vivido un proceso de crecimiento demográfico y expansión urbanística que, precisamente, ha dejado a esta zona en pleno centro de importantes barrios de la capital insular, como Titerroy, Argana y San Francisco Javier. En medio de esta periferia urbana con escasos espacios públicos abiertos a la ciudadanía, el Acuartelamiento ocupa alrededor de 60 mil metros cuadrados situados en una zona privilegiada de Arrecife, conectando la parte norte y sur de la ciudad, y siendo, por tanto, una pieza fundamental para el desarrollo de Arrecife”, apuntan desde Somos Lanzarote.
Desde Somos Lanzarote recuerdan que esta visión ha sido compartida por diversas instituciones insulares, incluida su Ayuntamiento, de tal forma que el Plan General Supletorio (PGOs) de Arrecife contempló la reconversión del acuartelamiento en un espacio libre público y para uso dotacional.
Además señalan que hubo momentos en los que la piscina de los cuarteles tuvo un uso deportivo y terapeútico para la ciudadanía, pero que en la actualidad, las instalaciones del Acuartelamiento se encuentran restringidas a un uso exclusivamente militar desconociéndose la cantidad de personas que trabajan en el mismo, pero cuyo número sería inferior a treinta.