Por Nona Perera, candidata a la presidencia del Cabildo de Lanzarote
A Gloria Moreno, la sargento del SEPRONA de Lanzarote, le han cerrado sin sanción los dos últimos expedientes de los seis que tuvo abiertos en su momento. Desde el verano de 2017 a primeros de 2018. Estos dos últimos, cerrados sin sanción alguna, pese a que uno de ellos era el referido a un supuesto maltrato de la sargento hacia el veterinario de la perrera municipal de Arrecife, que sí acabó en la suspensión cautelar de empleo y sueldo durante tres meses de la sargento Moreno.
El único caso que la sargento Moreno tenía pendiente hasta la pasada semana era una acusación en un juzgado penal de Arrecife promovido por un compañero y subordinado suyo, el guardia Miguel Ángel Padial, que la acusa de falsedad en documento público. La motivación del guardia para denunciar a Gloria surgió a raíz de que esta informara a sus superiores que este agente podía estar boicoteando los operativos de la propia Guardia Civil en el islote de Alegranza, cada vez que el cuerpo armado decidía desplazarse al islote, en cumplimiento de las competencias de vigilancia que ostenta este cuerpo.
De hecho, el operativo desarrollado por la sargento Gloria Moreno en verano de 2015 fue el primero que tuvo éxito en veinte años de intentonas frustradas del SEPRONA para acabar con la caza furtiva de esta ave protegida.
La semana pasada, se ha sabido que tres de sus subordinados en el SEPRONA, entre los que se encuentra el citado Miguel Ángel Padial, de baja laboral desde hace dos años, la denuncian por acoso psicológico u hostilidad y señalan que Gloria es la causa de sus males. El efecto de que tres personas distintas, aunque asociadas denuncien, lo equiparo a cuando tres personas están metidas en un agujero y siguen cavando.
La actual abogada de Gloria Moreno en esa causa penal pendiente, promovida por Padial, ve con optimismo la situación de la sargento por cuanto la acusación no tiene virtualidad ninguna, pues existen pruebas y testimonios potencialmente relevantes. Sin embargo, la fiscal designada en el caso -nuera de Dimas Martín Martín- pide para Gloria una pena de 4 años, y su práctica expulsión del cuerpo de la Guardia Civil.
Por otro lado, por fin cuatro años después de los hechos, el pasado 11 de mayo se celebró la vista oral contra los hombres que cazaron furtivamente pardelas y que Gloria Moreno denunció porque los sorprendióin fragantien Alegranza, en agosto de 2015. Entre ellos figuran, como promotores de aquella excursión sangrienta, los hermanos González Berriel.
Por su parte, el coronel Ricardo Arranz, que acaba de pasar a la reserva jubilado pocos días antes, ha declarado que aquella actuación de la sargento fue positiva y ejemplar, pero, aún así, todas las acciones disciplinarias contra la sargento partieron de su iniciática como jefe de la Comandancia de la Guardia Civil de la Provincia de Las Palmas y del Capitán Jefe del SEPRONA de la misma provincia, Germán García García.
Por lo expresado, podemos afirmar que de este sumario de Gloria Moreno si no puede decirse más, y no se puede, es que ya está dicho todo: el kilometraje de las cloacas es infinito y sus ramales ilimitados.
Mis palabras solo reflejan la superficie de este caso, pero la realidad nos demuestra que las explicaciones simples nunca revelan toda la verdad. Las pruebas de los delitos son las evidencias físicas, en este caso los cadáveres de las crías de pardelas, metidos en bolsas y en calderas, pero no son los motivos, que en este supuesto conservan un halo de misterio, porque a pesar de que bajamos de los árboles hace miles de años, la depredación forma parte del ADN de quienes no dudan en masacrar un ave protegida para satisfacer...¿el qué?
En esta tierra existen dos tipos de personas, las que se elevan -como Gloria- y las que se inclinan, en este caso para seguir socavando su propio hoyo.
Siempre que escribo algo debo empezar por los hechos, las verdades. Y sobre esto debo decir que Gloria me inspira confianza y como soy yo quien decido qué personas se instalan para siempre en mi recuerdo y pensamiento, la elijo a ella para que se aloje en mi memoria, para poder recurrir a su buen hacer, cuando así lo necesite.
Gracias Gloria por hacerte fuerte en un mundo que nos quiere débiles. Gracias Gloria por luchar por los derechos de los animales. Gracias Gloria por reivindicar tu profesión en un mundo machista que a la hora de la verdad siempre quiere aislar a las mujeres. Seguimos trabajando.