“Condenarme, no importa, la Historia me absolverá”

  Fidel Castro Ruz, 16 de octubre de 1953

Ayer, 26 de noviembre, amaneció con la triste noticia del fallecimiento del Comandante Fidel Castro Ruz, líder de la Revolución Cubana y una de las figuras políticas más importantes del siglo XX.

Desde Alternativa Nacionalista Canaria queremos, en primer lugar, manifestar nuestra solidaridad al pueblo cubano, a su representación diplomática en las islas Canarias y en el Estado Español así como a todos y todas las internacionalistas del mundo.

El hombre que fundó el Movimiento 26 de Julio en 1953, y que, e 1 de enero de 1959, entró, con las Fuerzas del Ejército Rebelde, triunfante en Santiago de Cuba, al tiempo que el dictador Fulgencio Batista huía hacia Estados Unidos, se convirtió rápidamente en el símbolo de rebeldía de todos los hombres y las mujeres del mundo que luchamos por un mundo más justo, más libre y más solidario.

Los triunfos construidos por la revolución en más de 50 años de socialismo, en el terreno de la educación, la sanidad, la alimentación, el deporte la música y la calidad de vida del pueblo cubano, han doblegado a los organismo internacionales que no han tenido más remedio que reconocer los mismos pese al brutal y criminal bloqueo que contra esta pequeña isla del Caribe han mantenido Estados Unidos y las grandes multinacionales desde 1960.

Pero la partida física de Fidel Castro no es una pérdida sólo para el pueblo cubano sino para todos los pueblos del mundo, especialmente a aquellos sufrimos la opresión colonial y del gran capital, pues su compromiso internacionalista, anticolonialista y antimperialista,  le llevo a sembrar las zonas más necesitadas del mundo de personal sanitario, de alfabetización, de calor revolucionario sin pedir jamás nada a cambio.

Hoy Alternativa Nacionalista Canaria recuerda que Cuba fue, después de Venezuela, el principal destino de nuestros migrantes, de ellos diría Fidel:

“El canario fue por excelencia el más humilde de los inmigrantes. Él no marchó a Cuba en plan de opresor o explotador. Vino a trabajar y a luchar a nuestro lado, ayudó a forjar el país con su laboriosidad proverbial, sufrió con nosotros, combatió, creó una gran familia, y se dignificó también al fin, junto a todo el pueblo, en la patria libre y revolucionaria de hoy”.

Comandante en Jefe de la Solidaridad Internacional te saludamos y nos comprometemos a seguir tu ejemplo de lucha anticolonialista, antimperialista, social e internacionalista.

 

¡FIDEL VIVE EN LA LUCHA DE SU PUEBLO, EN LA LUCHA DE NUESTRO PUEBLO!