Al renunciar al desempeño de sus funciones, que no son otras que representar profesionalmente al colectivo de farmacéuticos y farmacéuticas e implicarse en una escandalosa operación inmobiliaria mediante la cual se procedería a la venta a un promotor inmobiliario del emblemático edificio sede del Colegio Oficial de Farmacéuticos que, paralelamente, se instalaría en otra sede de nueva construcción, doble operación inmobiliaria por lo tanto al vender la sede actual y comprar otra nueva, al renunciar al desempeño de sus funciones y atribuirse unas competencias que no le corresponden, decimos, el máximo representante del Colegio de Farmacéuticos se autodescalifica para representar los intereses de dicho colectivo.
Una operación sin cobertura legal. El presidente del Colegio se inventó toda una parafernalia intentando implicar a todo el colectivo que, supuestamente, representa, en sus tejemanejes para lo que incluso sometió a la votación de los colegiados y colegiadas su envenenada propuesta, realizando votaciones, por primera y única vez, tanto en Gran Canaria como en Lanzarote y Fuerteventura, además de montar toda una infraestructura para ir farmacia por farmacia a recoger el voto de los presionados colegiados y colegiadas, en una extraña interpretación de lo que es una Junta General, sin cobertura en el ordenamiento jurídico, lo que no le sirvió de mucho pues apenas cuatro cientos incautos votaron la propuesta, lo que ni de lejos supone el quorum necesario para considerar mínimamente representativa la votación, máxime cuando prácticamente la tercera parte votó en contra, tratándose de un colectivo de más de dos mil colegiados y colegiadas, lo que se traduce en una raquítica participación de menos de un 20 por ciento cuando según el artículo 9 de los estatutos dicen textualmente: “Los acuerdos sobre modificación de los estatutos y los de adquisición o enajenación de bienes inmuebles, requerirán la asistencia a la Junta General de al menos el 25 por ciento de los colegiados y la mitad más uno de los votos emitidos legalmente”.
Un insulto a la inteligencia. Según publica en su página web. “La Junta General Extraordinaria del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Las Palmas ha aprobado la venta de su actual sede de la plaza de Santa Ana y la posterior adquisición de una nueva sede, tras una votación en la que 319
colegiados votaron a favor y 117 en contra, registrándose 6 abstenciones y 2 votos nulos.El presidente del Colegio, Juan Ramón Santana Ayala, agradeció la asistencia a la Junta que ha tenido lugar en el Gabinete Literario de Las Palmas de Gran Canaria, en el Club Náutico de Arrecife y en la Cámara de Comercio de Fuerteventura. El acuerdo autoriza a la Junta de Gobierno a la venta del inmueble de la plaza de Santa Ana y a la adquisición de un nuevo inmueble. Una vez cerradas estas operaciones, el Colegio convocará un concurso entre arquitectos para elegir el proyecto de adecuación de la futura sede colegial”, sin mencionar, obviamente, el número total de colegiados que, como se dijo previamente, sobrepasan los dos mil. Como puede leerse al final des escuetísimo comunicado, una vez “cerradas las operaciones” el Colegio convocará un concurso entre arquitectos para elegir el proyecto de adecuación de la futura sede colegial, lo que no deja de ser sorprendente pues una operación de esta envergadura debió presentarse con un concienzudo estudio para que los afectados supieran a qué atenerse con respecto a la propuesta que se les hizo, es decir, en primer lugar hay que realizar el concurso de adecuación, si no lo estuviera, de la actual sede colonial y, en consecuencia, abordar las reformas que fueran o fuesen necesarias, pero claro, esto resulta mucho más económico que construir o adecuar una nueva sede y además no se vendería la sede actual y no se construiría otro mastodóntico edificio siguiendo la política desarrollaste que ha arruinado el winiwada y, con ella, la isla de Tamarán entera.
En conclusión, instamos a la fiscalía anticorrupción a tomar en consideración los hechos así como a la Consejería de Sanidad a abrir el correspondiente expediente para clarificarlos y a depurar las responsabilidades a que hubiera lugar, así como a los excelentes profesionales farmacéuticos a exigir la inmediata dimisión de la Junta Directiva con su presidente a la cabeza, pues el dinero de los colegiados y colegiadas no es para especular con él, sino para contribuir a la formación y reciclaje de los profesionales farmacéuticos, las labores de investigación e incluso la subvención de proyectos de investigación de interés sanitario para Canarias. No estaría de más recordar que fue el médico francés Verneau el que escribió en el siglo XVIII que de las Islas Canarias las que mejores perspectivas tenían era El Hierro y Gran Canaria debido a la abundancia de agua de la que disfrutaban, claro que Verneau no fue capaz de predecir la tala masiva de arbolado para abastecimiento de buques en el Puerto de La Luz y el consiguiente destrozo del territorio cambiando no sólo el otrora espléndido paisaje de la isla sino la misma climatología.
Ministerio de Ciencias Médicas de la República Democrática Federal Canaria