La grave y alarmante situación que atraviesa Canarias, conforman un estado de cosas que reclama a las fuerzas soberanistas canarias el comportamiento más responsable.

Tras treinta seis años la llamada vía autonómica, dentro del actual marco jurídico-constitucional del Estado Español, ha fracasado y está absolutamente incapacitada para resolver los problemas estructurales de Canarias, no pudiendo impedir que las decisiones cruciales sobre nuestra vida se tomen fuera de nuestro País: economía, régimen de propiedad, sectores estratégicos, aguas territoriales, recursos naturales, inmigración, sistema educativo, leyes laborales, espacio comunicacional propio etc. En cambio, sí que sirve como la herramienta ideal para la defensa de los intereses de la burguesía intermediaria colonial, que saquea los recursos de Canarias.

Declaramos, que los actuales indicadores políticos, económicos, sociales y sobre todo el porfiado afán de las fuerzas de la derecha estatal y canaria por seguir consolidando sus posiciones en Canarias y en convertirla en plaza fuerte e inamovible de su agresiva estrategia, con una creciente e imparable militarización de nuestro País, nos indica que no incurrimos en exageraciones catastrofistas al subrayar que hemos entrado en una de las curvas más peligrosas de nuestra historia.

En Canarias, no habrá cambio social, ni progreso, ni desarrollo humano real para nuestro pueblo, si no es dejando en el baúl de nuestra historia el status de colonia, que hoy está disfrazada de “autonomía constitucional española”. Nos condenan a pedir limosnas en forma de subvenciones y presupuestos, cuando podríamos tener la riqueza que hoy hay aquí, que aquí se crea y que de aquí se va.

Manifestamos, que la gravedad de la situación manda y manda muchas cosas, y de entre ellas conviene resaltar la necesidad de realizar un elevado esfuerzo unitario por parte de todas y todos los soberanistas.

Es tiempo de vencer vicios sectarios, de avanzar con criterios rigurosos, de mancomunar fuerzas y esfuerzos y situar en primer plano: la unidad de las fuerzas populares soberanistas y estar a la altura que las circunstancias exigen.

ALTERNATIVA NACIONALISTA CANARIA Y UNIDAD DEL PUEBLO, consideran imprescindible formular y converger en torno a un programa político que recoja los rasgos comunes que puedan hilvanar a los y las soberanistas de nuestro archipiélago y les imprima a sus relaciones internas consistencia y estabilidad.

Se trata de encontrar el punto de unión que eleve el nivel y el papel de los y las soberanistas, de dar el salto de los acuerdos parciales o puntuales, al de opción política que dé respuesta en cada uno de los rincones de nuestro archipiélago, en definitiva, conformar una plataforma política democrática, popular y soberanista canaria.