La Presidenta del Cabildo, durante la presentación del Proyecto de Presupuesto General de la Institución para el Ejercicio 2023, adelantó la próxima adquisición de la Casa del Cabrerón, en el barrio de Valterra, la cual servirá como dotación ciudadana para el barrio, “carente por completo de este tipo de instalaciones”.
Con ello se hace justicia a una Iniciativa que presentó la Asociación ADEY GALGUEN en el ayuntamiento de Arrecife, y que fue defendida en el pleno celebrado el 7 de febrero de 2017 por el conocido activista social (hoy tristemente fallecido) José Díaz. En la misma se pedía que "conjuntamente con el Cabildo de Lanzarote, se den los pasos para la adquisición del edificio; y una vez rehabilitado, convertirlo en un Sitio de Interés Cultural".
- Seis años de espera
Dicha moción fue aprobada por UNANIMIDAD de todos los grupos municipales que entonces conformaban la corporación. Y al día siguiente, un grupo de técnicos se desplazó al ruinoso inmueble para estudiar las posibilidades que tenía de recuperación. ¡Nada más se ha hecho desde entonces!
Ahora, 6 años después de la aprobación de la Moción de ADEY GALGUEN, la todavía presidenta del Cabildo la ha desempolvado, y en vísperas de las elecciones municipales ha decidido adquirir, ¡por fin!, tan emblemático (y abandonado) lugar.
- Contenido de la Moción aprobada:
"Las instalaciones de este edificio (ubicado entre las calles Pérez Galdós, esquina Paz Peraza y Añaza), albergaron el Hospital de Los Dolores; fundado por la Diputación Provincial en junio de 1887. Y así fue hasta 1902, en que fue trasladado a un nuevo edificio (hoy es la sede de Cáritas). Durante ese periodo de 15 años, el lugar fue destino de los niños y niñas de la isla que eran abandonados al nacer, ya que allí estaba la Casa Cuna de Expósitos de Lanzarote.
Durante la Guerra Civil de España, el inmueble se convirtió en la Intendencia Militar, llegando a alojar a numerosos soldados. Más tarde fue una escuela. E incluso se llegaron a alquilar sus dependencias como viviendas, residiendo hasta hace bien pocos años, numerosos inquilinos.
Famosos fueron los tradicionales Bailes de Candil que se celebraban en el patio del inmueble, y que congregaban a docenas de vecinos de Arrecife. De aquellos encuentros musicales se hizo eco la Parranda “Los Amigos de Portonao”.
Todavía recuerdan los vecinos de los barrios de Valterra y El Lomo, cómo cada noche se reunían en uno de los márgenes del inmueble, sentándose en unos bancos que allí se encontraban. Las charlas se prolongaban hasta altas horas de la madrugada.
BAJO GRADO DE PROTECCIÓN EN PATRIMONIO
Sin embargo, hoy en día aquel edificio señorial se encuentra convertido en una estructura ruinosa, lúgubre y con algunos de sus accesos sellados para evitar la irrupción de los okupas. De hecho, hace algunos años allí se cometió un homicidio.
Peor aún, en el Catálogo de Patrimonio Histórico de Arrecife, la casona aparece con un Bajo Grado de Protección: sólo se exige mantener su fachada, y se puede modificar el interior del edificio. Y el temor es que el inmueble acabe siendo demolido, como de hecho pretenden algunos.
En la actualidad, los propietarios del edificio se han puesto de acuerdo para venderlo. Circunstancia que creo que debe ser tenida en cuenta, tanto por el Ayuntamiento de Arrecife como por el Cabildo de Lanzarote, si no queremos perder otro de los inmuebles históricos de nuestra isla.
Por todo lo cual, SOLICITAMOS:
- Que el Ayuntamiento de Arrecife tenga en cuenta el estado de este histórico edificio, para darle una mayor protección en el Catálogo de Patrimonio Histórico; evitándose su demolición como ya ha ocurrido con otros inmuebles emblemáticos.
- Que conjuntamente con el Cabildo de Lanzarote, se den los pasos para la adquisición del edificio; y una vez rehabilitado, convertirlo en un Sitio de Interés Cultural: sala de exposiciones, museo, sala de conferencias, actuaciones folklóricas, todo lo relacionado con la cultura. Con el añadido de que dispone de buenos aparcamientos".