La Iglesia de Nuestra Señora de Guadalupe de La Villa volvió a acoger el pasado 24 de diciembre, y como es tradición, la representación del Nacimiento de Jesús antes de la Misa del Gallo. Los ángeles dieron la bienvenida con el “Gloria” y los pastores y pastorcillas entraron al portal entonando los cantos centenarios que durante décadas han cantado las distintas generaciones de La Villa.
Ante cientos de vecinos y muchos turistas que acuden a Teguise en la Nochebuena se desarrolló también la esperada actuación del Rancho de Pascuas con su tradicional y peculiar sonido, y el baile del Salto, que lleva a los bailarines a besar al Niño.
El alcalde de Teguise, Oswaldo Betancort, y otros concejales de la Corporación compartieron con sus vecinos estos momentos de emoción y de alegría. Betancort señaló “lo original que resulta esta manera de celebrar la Navidad enLa Villa, un ritual que se repite cada año y siempre acaba calando en todos y despertando las emociones propias de estas fiestas”.
Para el párroco de Teguise, Nicanor Páez, era la primera vez que oficiaba la Misa del Gallo en la parroquia y siguió muy de cerca la representación tradicional del nacimiento interpretado por los niños del pueblo.