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Encuentran un nuevo fósil de ratite completo en los yacimientos paleontológicos de Órzola

laverdaddelanzarote.com  |  11 de septiembre de 2014 (14:41 h.)
Nuevo fósil de "ratite";
 

La cuarta campaña de intervención paleontológica sistemática de los yacimientos del Neógeno continental de Órzola,  que coordina y financia íntegramente el Cabildo de Lanzarote en el macizo de Famara, se cierra con avances importantes, entre ellos la extracción de otro huevo de ratite completo, el octavo que se encuentra desde que se comenzará a trabajar en el 2010 en estas excavaciones. En esta campaña también ha colaborado el ayuntamiento de Haría con logística y el adecentamiento de caminos para facilitar el tránsito a los yacimientos.

 

En esta última trabajaron 30 personas especialistas en la materia, del 4 al 24 de agosto, en tres puntos topográficos diferentes, Fuente de Gusa, Valle Chico y Valle Grande 1. Los trabajos, como en anteriores campañas, han estado dirigidos por Antonio Sánchez Marco, investigador perteneciente al Instituto Catalán de Palentología Miquel Crusafont.

 

El presidente del Cabildo, Pedro San Ginés, acompañado por el consejero de Patrimonio Histórico, Juan Antonio de la Hoz, pudo conocer esta mañana los resultados y últimos hallazgos encontrados en esta zona de la isla.

 

El consejero explicó que “lo más interesante de este huevo recogido este verano es que parte de su cáscara ha desaparecido después de su fosilización. Se ha mantenido el volumen y la forma del huevo, pero la cáscara se ha perdido parcialmente, por lo que es posible que ello ayude a comprender por qué no se encuentran huesos -con raras excepciones- en estos yacimientos”.

 

Igualmente, detalló que además de este nuevo huevo fósil entero, ha aparecidomedio huevo fósil de ratite en una zona que no se ha excavado de Fuente de Gusa, aunque sí prospectado. Este espécimen es de un tipo diferente de todos los que se han excavados por parte de este equipo hasta ahora, siendo pues su hallazgo novedoso.

 

Otros hallazgos

Del mismo modo, los especialistas estiman que en esta campaña se ha localizado y excavado dos huesos. Uno se trata de un pequeño hueso de caparazón (espaldar) de un neonato de tortuga y el otro es una vértebra que, aunque se conserva bastante deteriorada, puede pertenecer a la serpiente que ya se conoce y de la que se cuenta con una vértebra de su esqueleto recogida en la campaña 2010.

 

El informe de los investigadores arroja además otros datos relevantes. Destacan que se ha logrado uno de los objetivos planteados desde el principio en 2010 cuando se iniciaron los trabajos. Se ha podido relacionar cronológicamente Valle Grande 1 con Valle Chico. “Se han confirmado las sospechas de que ambos yacimientos no se formaron al mismo tiempo, con lo cual se amplía el lapso de tiempo en el que la primera fauna terrestre conocida del Archipiélago Canario se desarrolló en ellas”, subraya el informe del área de Patrimonio Histórico.

 

Destacan que en esta ocasión se ha dedicado más tiempo que en años anteriores a otro yacimiento, relacionado con Valle Chico, de modo que se cree poder precisar más la cronología de la fauna que se está estudiando. En particular, se han conseguido muestras geológicas datables, por lo que es posible que se pueda proporcionar una fecha bastante aproximada a la llegada de algunos de los animales que componían esta antigua comunidad desarrollada en un ecosistema con presencia de agua dulce.

 

Esta nueva excavación avanza en el hecho de la presencia de estas aves en Lanzarote, ya que “no hay constancia en ninguna otra parte del mundo de que haya avestruces (ratites) en Islas surgidas de la corteza oceánica, su procedencia y cómo llegaron a la Isla sigue siendo un tema de estudio”.

 

 

Parte didáctica

Durante la excavación, el Servicio de Patrimonio Histórico del Cabildo organizó también tres charlas en Arrecife, Haría y Órzola, así como un sendero por las excavaciones que despertó mucha curiosidad en la población.

 

El que no se pueda explicar cómo es posible que unas aves cuyos huevos datan de hace más de 6 millones de años -cuyos antecesores más inmediatos perdieron su capacidad de vuelo hace unos 90 millones de años-, y cómo pudieron llegar aquí, si las islas más antiguas emergen hace unos 20 millones de años, seguirá por tanto siendo un enigma a resolver.