Podemos matar a las cabras que aquí, ¡no pasa nada! En Madrid defienden el ecologismo, la protección de los animales..., y aquí dan autorización; y es más: traen de Doñana a tiradores para matar de un modo abochornante a las mejores cabras, que lo son por su alimentación y resistencia.
Otros callan, y no salen a desautorizar a quien/quienes han permitido que la ganadería siga mermando (el cabildo y sus allegados o ad látere).
Después salen dando explicaciones (que no convencen) y defendiendo lo indefendible. No hay nombre para esta despreciable acción, no tiene nombre ni justificación por mucho que intenten echar balones fuera: que si Europa, que si flora autóctona... ¡¡han vivido más de 2.000 años (entraron con los cannarii, luego guanches) y ningún daño han producido!! Muy contrariamente, nos han traído hasta el presente la rica flora que poseemos, y que sin ellas desaparecerá.
Es hora de que el pueblo canario tome conciencia. Las elecciones de Espakistán (antes España) de diciembre deben servir para mandar a mudar a todos los partidos que han sido responsables de esta masacre.
Mientras se dedican a matar cabras, son miles de personas las que pasan hambre. ¿Acaso esa carne no hubiera servido para alimentar a cientos de familias (no es comestible, porque para ello deben ser sacrificadas en el matadero del cabildo, y no por los montes y riscos)?
O despertamos o seguiremos ordeñando a las tabaibas. ¡Venga, comamos queso de tabaibas y hagamos yogur con su dulce leche! (me imagino cogen la ironía)...
San Francisco de Asís, dijo: “... loado seas mi Señor, por las hermanas cabras, que son alegres en sus retozos, nos alimentan con su leche, y hasta de la piel de una de ellas, la hermana Clara, me ha hecho una túnica...”.
Y yo me pregunto, ¿qué dice Pablo Iglesias de que un consejero de su partido realice estas acciones?