Desde que en el amanecer del S. XV Lanzarote sufrió el cambio brutal de una culturade tipo neolítico, basada económicamente en una reducida producción de subsistenciaderivada de la explotación de la cabra, la oveja y el cultivo de la cebada, a otra culturade corte medieval, " mucho más evolucionada ", IMPUESTA por la fuerza a sushabitantes, los majos, con lo que ello supuso de cambios radicales en su economìa ysociedad, la historia se repite. Como todos sabemos, nuestra isla, desde su conquista yhasta el siglo XIX, constituyó un Señorío al igual que Fuerteventura, La Gomera y ElHierro. El Señor era el que, a través de administradores, gobernaba la isla, nombrandosus cargos y percibiendo sus rentas ( el quinto señorial, es decir, un 20 % del valor delos productos exportados ). Su economía se basaba en la exportación de ORCHILLA,productos ganaderos y, sobre todo, en las RAZZIAS ESCLAVISTAS o cabalgadas enlas costas vecinas del sur de Marruecos, Mauritania y Sáhara. A medida que decrecieronlas cabalgadas, prohibidas a fines del XVI, aumentó el cultivo de cebada y trigo.
Tytheroygatra basaba, en el siglo XVII, su economía en los productos agrícolas,CEREALES. Soportó con sus cosechas, como Fuerteventura, la elevada demanda de lasislas centrales que dependían del trigo y la cebada. Esta trayectoria económica de la islase vio transformada por los episodios volcánicos entre 1730 y 1736, compensadaal tiempo por las destacadas cosechas obtenidas en las zonas donde la ceniza y el picónse acumularon. Se plantaron cultivos de viña, de árboles frutales y se introdujeron congran aceptación el millo, la papa y las legumbres. El último tercio del XVIII es la etapamás relevante y beneficiosa del siglo para la isla. Surge una burguesía local y foránea,vinculada primero a la producción de VINOS y aguardiente para el comercio exterior yluego con la introducción y explotación de la BARRILLA.
En la primera mitad del siglo XIX la economía de Lanzarote se basaba en los cultivostradicionales, cebada, trigo y avena, dirigidos al mercado interno y otras islas; la papa,millo y legumbres para cubrir la demanda local y el fomento de productos para laexportación como la barrilla y el vino. La caída de la barrilla desde finales del primertercio del XIX, por la aparición de las sosas de laboratorio, más una intensa sequía,propició el aumento de la EMIGRACIÓN hacia las islas centrales y América. A partirdel segundo tercio del siglo, la introducción de la COCHINILLA permitirá elincremento de la circulación de capitales. Con la entrada del siglo XX este cultivo noencuentra sustituto, debido al descubrimiento de las anilinas artificiales, y por ello laEMIGRACIÓN hacia América o resto del Archipiélago se multiplica. Lanzarote intentaimplantar las fábricas de TABACO, factorías de salazón, de sal,... En la isla de losvolcanes, por ese tiempo, aparte de una agricultura de subsistencia, era la PESCA en lavecina África uno de los pilares de la economía insular con la creación de las fábricasde conservas. Estas industrias vivieron su mayor esplendor entre los años 1950 y 1960,pero tras la descolonización del Sáhara Español se produjo su práctica desaparición.
Otra vez el fantasma de la EMIGRACIÓN, en Lanzarote sólo reinaban las aulagas ylas piedras. Pero durante la década de 1960 a 1970 se realiza el acondicionamiento delas carreteras, la ampliación de la pista de Guacimeta que permitirá en 1970 la aperturadel aeropuerto a los vuelos internacionales, la primera potabilizadora de la isla y laapertura del primer Centro Turístico, la Cueva de los Verdes, al que seguirán Jameosdel Agua y Mirador de Malpaso. Es el Boom Turístico ( 1978-1988 ). Unaactividad económica alcanza beneficios nunca antes logrados: el TURISMO.
Cuando hemos descubierto " la gallina de los huevos de oro " y el monocultivoperfecto que nos ha dado una sociedad del bienestar, otra vez, DE FUERA, se nos vienea imponer un nuevo modelo económico, el PETRÓLEO, contrario a nuestra filosofía deDESARROLLO SOSTENIBLE ( 1993. Reserva de la Biosfera ), a nuestra apuesta porlas ENERGÍAS RENOVABLES, a nuestra principal actividad económica, el turismo, ya la vida, el AGUA y la BIODIVERSIDAD MARINA. Permitiremos que decidan,desde fuera, el futuro de nuestros hijos,-as, sin escuchar la opinión de los ciudadanos yla instituciones de Canarias. Consentiremos, otra vez, que el fantasma de la emigraciónsobrevuele nuestras cabezas. Por favor, no dejemos que los árboles no nos otorguen elplacer de ver el bosque.
JUAN ANTONIO DE LA HOZ GONZÁLEZ, CONSEJERO DE COALICIÓNCANARIA EN EL CABILDO DE LANZAROTE.
Arrecife, a 21 de Abril de 2013.