Félix Adargoma
Como siempre, los asistentes a la manifestación del 1º de mayo son ciudadanos y ciudadanas, trabajadores que, o son representantes de los trabajadores en los Comités de Empresas y Juntas de Personal, delegados sindicales y liberados de los sindicatos, y militantes de partidos políticos: en total, una minoría en comparación con los miles de trabajadores en activo y otros miles en situación que se encuentran en situación de desempleo, que no acuden a las manifestaciones y que las organizaciones políticas y sindicales de izquierda no intentan informarlos y movilizarlos para qué acudan a tal evento el 1º de mayo, o a cualquier otra movilización reivindicativa de sus derechos recogidos en la Constitución, Constitución en su contenido total, no parcial de lo que les interesa, que no respetan ni aplican los gobiernos de turno llámanse del PP o del PSOE, o Coalición Canaria en la "Comunidad Autónoma" Canaria.
Pero lo anterior no es el motivo del presente escrito. El motivo real es que los representantes de organizaciones sindicales --creo que fueron dos--, solicitaron la autorización, o notificaron, a la Delegación del Gobierno, e informaron que la manifestación se iba a llevar a cabo como siempre: salida de la plazoleta del Obelisco sito en C/ Tomás Morales, y recorrido calle Tomás Morales, bajada por C/. Juan XXIII, C/. León y Castillo hasta el edificio del Gobierno de Canarias. Presentar un manifiesto de protesta ante el Gobierno de Canarias, contra las políticas antisociales y recortes de derechos que está llevando a cabo el gobierno CC-PSOE y, luego, continuar por C/. León y Castillo hasta la Plaza de la Feria, Delegación del Gobierno de Canarias, donde se presentaría otro manifiesto-denuncia ante dicha Delegación por las políticas antisociales y recortes de derechos que está llevando a cabo el Gobierno del Partido Popular.
Pero cuál fue la sorpresa, o la mala leche de la Delegación del Gobierno del PP, que le fue denegado dicho recorrido a las centrales sindicales peticionarias de dicha manifestación, alegando la Delegación del Gobierno que el recorrido trastocaba el tráfico de vehículos, y que escogieran otro recorrido, cuando todos sabemos que en un día de fiesta, el tráfico de vehículos en la ciudad es mínimo,,,
¿Pues entonces qué hicieron los responsables de las Centrales Sindicales que presentaron el escrito de la manifestación en dicha Delegación del Gobierno? Pues se achantaron, plegándose a los caprichitos y abusos de la Delegada del Gobierno, o a su mala leche, y optaron por otro recorrido, que fue: concentración en el Parque de San Telmo y recorrido hasta la Plaza de Santa Ana, donde finalizó dicha manifestación.
En dicha Plaza de Santa Ana están ubicados los edificios-casa del Obispo de Las Palmas, La Iglesia Catedral y el Edificio del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria. Lo frustrante al final de la manifestación en dicha Plaza de Santa Ana fue que 1) el Obispo no salió al balcón a bendecir a los manifestantes, pidiéndole que sean buenos chicos y chicas, 2) que el Alcalde Cardona no salió al balcón del Ayuntamiento a recoger las quejas de las Centrales sindicales y lo último, 3) que la iglesia-Catedral no abriera las puertas para que los y las manifestantes pudieran oír misa y tocaran las campanas...
Los responsables de las Centrales Sindicales que solicitaron o informaron a la Delegada del Gobierno de Las Palmas sobre la manifestación y su recorrido principal, al parecer "desconocen" que existe una Constitución, una normativa para manifestaciones públicas y unos juzgados que garantizan el derecho a manifestarse en el recorrido que se notifique, sabiendo que no entorpece el tráfico por ser día festivo ¿Por qué entonces se achantaron y se bajaron los pantalones ante la negativa de la Delegación del Gobierno a aceptar el recorrido solicitado en su escrito de petición o información de la manifestación del 1º de mayo, y no acudieron al Juzgado a presentar una demanda contra la Delegada del Gobierno por vulneracion de derechos sindicales y fundamentales?
Si en este asunto, que para algunos no tiene importancia pero para otros sí la tiene, se bajan los pantalones ciertos representantes de algunas centrales sindicales. ¿qué harán en las Mesas de Negociaciones con el Gobierno de Canarias, el gobierno Central del PP, y con la Patronal de los empresarios, negociando con los derechos y las justas reivindicaciones de todos los trabajadores y trabajadoras?