La movilización comenzará en el Quiosco de la Música, situado en el Parque José Ramírez Cerdá, y finalizará en el Cabildo de Lanzarote, donde se leerá un manifiesto.
Desde el Quiosco de la Música se recorrerá la avenida Mancomunidad hasta el hotel Lancelot. Para evitar las obras, desde esa esquina se subirá por la calle Vals de la Torre hasta la calle Manolo Millares, continuará por la calle Manolo Millares hasta la calle Guenia, se bajará por la calle Guenia para la reincorporación a la avenida Fred Olsen y continuará hacia el Cabildo.
Los convocantes de la manifestación, “ciudadanas y ciudadanos anónimos que no representamos a ningún colectivo ni partido político”, animan a todas aquellas personas que lo deseen “a que se unan a esta protesta histórica y elaboren pancartas con mensajes de protesta por la masificación turística y sus efectos en el territorio y en la calidad de vida de los residentes”.
Este movimiento reivindicativo está englobado en las protestas convocadas para el mismo día en las islas Canarias y en ciudades europeas como Granada, Barcelona, Madrid, Málaga y Berlín bajo el lema “Canarias tiene un límite” exigiendo un cambio de modelo turístico en el archipiélago.
Los convocantes, quienes recuerdan que forman parte de una movilización pacífica que apuesta por la sostenibilidad en el modelo de gestión de recursos naturales y sociales, agradecen también la participación de asociaciones y partidos políticos, pero les piden que no protagonicen la cabecera de la manifestación.
“La manifestación debe estar encabezada por la ciudadanía, por todas aquellas personas anónimas que se preocupan por el efecto del turismo de masas en la saturación de los recursos, la vivienda, la sanidad, los espacios naturales protegidos, los salarios precarios y la convivencia con el entorno”, señalan.
“Por ello, pedimos a las asociaciones que se sitúen en la mitad de la movilización y que los políticos se coloquen al final. Este movimiento es una demostración de que estamos al límite y que necesitamos un cambio decisivo. Lanzarote se agota. Lanzarote ya no se sostiene”, concluyen.