Jacqueline Araceli de Jesús arrendó una vivienda en la calle Frankfurt F-4 de Puerto del Carmen (Tías), por "40.000 pesetas al mes", el 11 de marzo de 1993. Y tras 25 años, pese a la subida de alquiler, y al pago puntual del mismo, ahora la heredera legítima del apartamento (por herencia) reclama judicialmente su DESAHUCIO, según la parte denunciante "para alquiler vacacional".
Concretamente el 11 de marzo de 1993, el entonces propietario de la vivienda se la arrendó a Jacqueline por "cuatrocientos ochenta mil pesetas anuales", en Contrato de Arrendamiento de Fincas Urbanas 0097940. Contrato que fue satisfecho por la arrendataria hasta la muerte de su arrendador, como lo certifican los pertinentes extractos bancarios.
Tras la muerte del arrendador, fue su hija quién renovó los sucesivos contratos de alquiler, subiendo la cantidad a 300 euros mensuales (las antiguas 50.000 pesetas) en 2003 y 2008 (firmadas).
Hasta que de repente en 2017, un año antes de que expirara el contrato de cada 5 años presentado en 2013 (y no firmado oficialmente, como asegura el abogado), le presentan un contrato de "1 año", a diferencia de los habituales de "5 años". Y Jacqueline, sospechando, después que desde la heredera de la parte arrendadora le dijeran que "estaban perdiendo dinero con el alquiler", y que "con el alquiler vacacional ganarían más", se negó a firmar, AUNQUE SIGUIÓ PAGANDO LOS ALQUILERES (COMO LO DEMUESTRAN LOS PERTINENTES EXTRACTOS BANCARIOS).
- La abogada de oficio "no aparece"
De repente el 16 de octubre de 2018 se abre el procedimiento 724/2018 contra Jacqueline Araceli de Jesús para que desaloje la vivienda que lleva ocupando desde hace 25 años, PESE A QUE HA ESTADO PAGANDO TODOS LOS ALQUILERES HASTA LA FECHA, encima reclamando "casi 3.000 euros por perjuicios" sin especificar. Más aún, la abogada de oficio, "desde octubre hasta finales de enero" no ha contactado con su presunta defendida, como asegura la misma. Circunstancia que ya ha sido denunciada en el Colegio de Abogados.
- Pensionista y enferma
Jacqueline Araceli de Jesús es pensionista, gana "alrededor de 600 euros al mes, cuya mitad está destinada al alquiler". Está enferma, anda con muletas, y su único hijo "está en silla de ruedas en El Hierro, por la falta de un riñón". Pero, según ella, "siempre he pagado mis alquileres en los últimos 25 años, por lo que me extraña que ahora me quieran desahuciar por los alquileres vacacionales".
Curiosamente, en la actual demanda de desalojo, aseguran que le mandaron "hasta" 2 burofax que "no llegó a firmar". Pero asegura Araceli que "jamás he recibido burofax alguno, porque en esos días he estado en el Hospital por mis enfermedades, y hasta en el supermercado, Y PUEDO ATESTIGUAR Y DEMOSTRAR QUE NO HE RECIBIDO DOCUMENTO ALGUNO".