Según informa la Guardia Civil, los hechos ocurrieron a principios de marzo cuando los servicios de seguridad del citado Centro Penitenciario observaron a través de las cámaras de vigilancia como "un conductor se bajaba de un turismo, se acercaba a la valla que delimita el perímetro exterior del recinto y lanzaba con fuerza un objeto hacia el interior".
De esta manera, por la trayectoria del lanzamiento, se supuso que "el hombre intentaba depositar el bulto en el patio donde se encontraban los reclusos en su horario de paseo".
Tras realizar el "lanzamiento", el sujeto abandonó el lugar de los hechos en su turismo. Sin embargo, minutos después de los hechos, una de las patrullas que prestan protección en el centro penitenciario logró interceptar al presunto autor de los hechos cuando pretendía huir a Arrecife.
- Era la segunda vez
Por su parte, los agentes pudieron relacionar al detenido con otro hecho similar ocurrido el pasado 28 de febrero, pudiéndose constatar que en el primer lanzamiento el bulto alcanzaba un peso de 317 gramos de hachís. En esta segunda ocasión, donde se pudo producir la detención, el paquete contenía 174 gramos de la misma sustancia, más 10 dosis de cocaína.
Este tipo de acciones encuadradas en los capítulos contra la salud pública en el Código Penal contempla penas superiores o agravantes cuando los hechos descritos se lleven a cabo en centros docentes, en centros, establecimientos o unidades militares, en establecimientos penitenciarios o en centros de deshabituación o rehabilitación, o en sus proximidades.