El matrimonio conformado por María del Carmen Fernández Martínez y José Luis Conde Arosa habita en “un entorno totalmente rural” del municipio de Tinajo, más concretamente en los Morros de San Roque. Y allí explotan una casa rural de alquiler vacacional, conocida como ‘Casa Lancelot’.
Su vida (y la de los vecinos de la zona) trascurría entre su trabajo y su vida cotidiana en aquel tranquilo y relajante lugar, hasta que, en enero de 2020, “unos inquilinos” se instalaron en la vivienda contigua, “literalmente pared con pared”. Desde ese mismo instante, aseguran, el mundo comenzó a desmoronarse a sus pies.
Recién instalados en la vivienda contigua, siempre según reza en la denuncia, “se produjo la primera fiesta organizada el sábado 18 de enero de 2020, CON FORTÍSIMOS RUIDOS QUE HACÍAN, LITERALMENTE, RETUMBAR LAS PAREDES”. María del Carmen y José Luis “ni tan siquiera podían hablar y escucharse entre sí dentro de su propia casa”.
José Luis nos explica que ese fue el “comienzo de una pesadilla que parece no tener fin”: se siguieron produciendo “nuevos episodios, nuevas fiestas con música totalmente descontrolada a altas horas de la madrugada y forzando varias intervenciones policiales en la casa de los querellados”.
Al respecto, hay que reseñar que muchas de las veces que la Policía Local de Tinajo y la Guardia Civil intervinieron en alguna de dichas “fiestas”, fue a petición de “otros vecinos más distantes, en razón de que tales fortísimos ruidos estaban perturbando el descanso y la tranquilidad de aquel entorno rural y privilegiado, una y otra vez”.
- Fiestas “continuadas” durante el Estado de Alarma
El 14 de marzo de 2020 se decretó el Estado de Alarma en todo el territorio español, a causa de la pandemia del COVID, y por tanto se restringieron movimientos, horarios y aglomeraciones. Sin embargo, el matrimonio denunciante asegura que “el fin de semana del viernes 20 de marzo al domingo 22 de marzo celebraron UNA GRAN FIESTA QUE DURÓ 48 HORAS SEGUIDAS Y CON FORTÍSIMAS EMISIONES DE SONIDO AL ENTORNO”.
No sólo eso, sino que, a la semana siguiente, a las 20 horas del 28 de marzo, “la policía local acudió, avisada por otros vecinos”.
Pero no sólo los fines de semana, sino que tal y como reflejan los denunciantes en su primer escrito de querella, hubo “escandaleras”: el domingo 19 de abril, el lunes 27 de abril, el sábado 2 de mayo, el lunes 11 de mayo, el jueves 21 de mayo, el sábado 23 de mayo, el sábado 13 de junio, el lunes 15 de junio, el viernes 19 de junio, el sábado 4 de julio, el sábado 11 de julio…
Dicha situación ha provocado los consiguientes trastornos de salud a los denunciantes, tales como “creciente estado de ansiedad, insomnio, cefaleas, alteraciones cardiacas, visitas a las urgencias hospitalarias”. De hecho, un facultativo médico le prescribió a Mari Carmen, el 21 de julio de 2020, “inapetencia, insomnio, falta de atención, falta de motivación y opresión de forma regular en el pecho”. José Luis fue atendido el 17 del mismo mes en el Servicio de Urgencias, tras sufrir “pinchazos continuos debajo de la parrilla costal izquierda” de modo continuado durante días.
- 86 decibelios
Las cosas llegaron a tal extremo que el matrimonio se vio obligado a comprar la aplicación “Sound Meter”, que realizó mediciones de ruidos cada vez mayores: 62 decibelios en la fiesta del 26 de marzo; 70 decibelios el 19 de abril; 75 decibelios el 9 de agosto y 86 DECIBELIOS EN LA MADRUGADA DEL 25 DE JULIO.
El matrimonio asegura haber estado viviendo “una absoluta impotencia" tras las reiteradas personaciones de agentes de la policía, "totalmente infructuosas pues los hechos se volvían a reproducir con la llegada de otro fin de semana, y a veces incluso nada más salir los agentes por la puerta", convirtiéndose todo ello en "UNA SITUACIÓN INFERNAL" por mor de la cual se ven "prisioneros de una espiral de progresivo deterioro" de su estado de salud psico-físico, "pérdida de horas de sueño, ansiedad, sentimientos de indefensión, pérdida de concentración, de apetito…”.
La situación llegó a tal extremo que José Luis y Mari Carmen de vieron obligados “A IRSE DE SU PROPIO DOMICILIO” algunos fines de semana, “y alojarse en un hotel suficientemente alejado de toda esta situación”.
- Obligados a devolver el importe del alquiler a sus clientes
También se ha visto perjudicado económicamente el negocio de la casa de alquiler vacacional, del que este matrimonio depende para vivir. Según José Luis, toda esta situación les ha causado un “MUY GRAVE PERJUICIO ECONÓMICO”, de tal manera que se ha visto obligado a “devolverle el importe del alquiler a varios clientes alojados debido a tales fiestas”.
Peor aún, han tenido que desviar a clientes “para no causarles perjuicio y no deteriorar la imagen del negocio”, hacia otros alojamientos alternativos, “perdiéndose por completo tales clientes y pernoctaciones ante la imposibilidad de darles alojamiento con normalidad”.
- Querella, recusación del juez y apertura de diligencias del CGPJ
El 2 de septiembre de 2020, el matrimonio presentó una Querella contra los inquilinos de la vivienda en cuestión. Pero el 5 de noviembre, aseguran, el Juzgado nº 4 dictó un Auto con el “archivo de plano de la investigación y actuales diligencias previas… a pesar de los numerosos partes de baja médica y tratamientos de María del Carmen y de las mediciones de decibelios de las fiestas, audios de atronadora música tomados desde su casa”.
Por ello, el abogado del matrimonio presentó un Recurso de Reforma el 12 de noviembre, que fue apoyado por la Fiscalía. Pero una vez aceptado (en diciembre), el 12 de marzo de 2021 se dictó otro Auto, “admitiendo uno sólo de los presuntos delitos objeto de la querella”, interponiéndose un segundo Recurso de Reforma el pasado 21 de abril.
Hasta que el lunes 24 de mayo de 2021, el matrimonio querellante presentó un Incidente de Recusación contra el juez, alegando que “en los 9 meses de instrucción transcurridos desde el 2 de septiembre de 2020 hasta el momento de la formalización del presente incidente, no ha venido a ser practicada todavía salvo omisión o error involuntario de esta parte, ni una sola diligencia de prueba, ni tan siquiera la elemental toma de declaración de los querellados”.
Entre las alegaciones se recogía "la presunta participación" del juez "en una supuesta fiesta de carácter ilegal presuntamente tenida lugar el 18 de Febrero de 2021 en la localidad de Yaiza". Añadiendo que "resulta ser el propio Juez instructor, máxima autoridad en las presentes diligencias, el que aparentemente también habría venido participando en este tipo de eventos durante el estado de alarma", tomando "presuntamente parte en ella a pesar de la propia antijuridicidad y contravención de la norma que le hace acreedor de sanción, inherente a tales hechos, y que en ningún modo puede desconocer".
Tal y como adelantó LA VERDAD DE LANZAROTE en su edición del pasado 29 de junio, "la Sección de Actuaciones Previas y Expedientes Disciplinarios del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) habría abierto Diligencias Informativas al titular del Juzgado nº 4 de Arrecife, tras ser recusado por el matrimonio propietario de una vivienda de Tinajo".
También como publicó en primicia LA VERDAD DE LANZAROTE en su edición del pasado 16 de julio, "la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Las Palmas ha RESUELTO 'admitir a trámite el expediente de recusación', interpuesto por María del Carmen Fernández Martínez, contra el Magistrado titular del Juzgado nº 4 de Arrecife"
- Taladrando a las 4 de la madrugada
Pero mientras continúa el controvertido procedimiento judicial, José Luis lamenta que "las escandaleras continúan, ya no sólo con fiestas hasta altas horas, sino incluso en una ocasión, a las 4 de la madrugada, SE PUSIERON A TALADRAR LA PARED DURANTE HORAS. ¡Esto es un infierno! No tiene sentido".
También denuncia que "tienen la música a todo volumen a cualquier hora del día, siendo imposible poder concentrarse en nada".
- Intervención de la Guardia Civil
Por si fuera poco, en horas de la mañana del pasado lunes 16 de agosto, los efectivos de la Guardia Civil intervinieron en unas dependencias de la citada propiedad, requisando un importante número de plantas de marihuana.