-Soy plenamente consciente de la obligación legal y me atengo a las consecuencias legales que puedan derivarse de mi decisión personal como padre y tutor, de no llevar a mi hijo al instituto Agustín Espinosa, que cursa estudios en el curso 2B, a partir del lunes 15 de febrero.
Estoy -y me siento responsable- más que harto de comprobar las reiteradas actitudes para con él, de abuso, acoso, malos tratos físicos y psíquicos por parte de distint@s 'energúmenos' y quiero pensar que obedecen a la 'jodida' envidia, por sus excelentes calificaciones, no sólo académicas, también es el ecodelegado de su aula....
-Este viernes pasado, ha supuesto la gota que ha colmado el vaso, por humillaciones públicas y agresión física después tras haber obtenido el premio de mejor disfraz de carnaval del instituto y antes de éso tras querer irse del instituto por otros abusos, tras que otra tutora y yo mismo lo convencimos para quedarse y disfrutar de la fiesta de disfraces.
Llegó a casa y se echó a dormir, aquejado de fuertes dolores de cabeza, producto de ser agredido en la misma de forma reiterada en el patio del colegio.
El lunes 15 de febrero, tras comunicarlo personalmente a la tutora y director del centro, presentaré tras registrar en Secretaría el comunicado de inasistencia por éstos motivos y hasta nueva órden, adjuntando parte de lesiones y diagnóstico médico.
Entiendo que los profesores no pueden estar en todo, entiendo a quién pueda pensar que una forma de intentar solucionar ésto sea enfrentarse a éstos energúmen@s, aunque creo que quién deberían de ser expulsados del centro son éstos mismos y no forzar a los demás a soportarles e incluso abandonar el centro