Raza guanche educada
Por mujeres nobles
Valientes y guerreras.
Raza guanche educada
Por mujeres nobles
Valientes y guerreras.
Mujeres que todo daban
Sin recibir nada
¿Sin recibir nada?
-si que recibían, ese amor,
Esa nobleza, de su gente, de su tierra
Eso le pasaba a Guayafanta
Unida con Chioare
Hermana de Mayantigo
Señor de Aridane
Tan enamorada de su noble guanche
Que su vida daría por el guerrero
Que tan altas cualidades tenía
Los días pasaban entre
Labores de casa, pesca y agricultura
Había algo que a Guayafanta
Eso le encantaba, los juegos de guerra,
Era en los que mas disfrutaba
Y en los que siempre ganaba
Días de felicidad, corrían en esa época
Con 35 años y la felicidad en sus manos
Llego el aciago día
¡Chioare es muerto, en una de las batallas!
En esas refriegas, con los españoles
Es muerto su ser amado.
Con rabia, dolor e ira
Guayafanta jura su venganza
Su vigor físico y animosidad
Los vuelca contra los asesinos
En el mismo lugar
Donde cayó su amado Chioare
Fue dura la batalla
Dura y violenta
Guayafanta viendo se perdida
Ante la superioridad de su enemigo
Con lágrimas y una bravura incalculable
Logra agarrar a uno de sus enemigos
Su intención no era otra, sino lanzarse por el abismo,
Suicidándose, con su enemigo por delante
Los castellanos le dieron caza
Logrando apoderarse de la canaria
Recuperando a la presa castellana
Pero como enérgica mujer palmera
Guayafanta se libera
Corriendo para el risco, es alcanzada
Disparándole en las piernas
Guayafanta es inmovilizada
Ya no se sabe nada de ella
Esta es la historia
Que cuenta la leyenda
No hay datos de que Guayafanta viviera
¡Pero tampoco de que muriera!
Esta es el ejemplo de una mujer canaria
¡Una mujer palmera!
Que casi gana a los castellanos
En una isla tan pequeña
¡Viva la mujer palmera!
¡Viva la mujer guerrera!