Cada vez que surgen temas de naturaleza política o,  la mayoría de las veces económica, entre España y Marruecos, éste último saca a relucir los expedientes relativos a los gases tóxicos para ejercer presión hacia la vecina España, usándolos en beneficio de sus intereses y creando una propaganda barata, haciendo de dichos eventos, una peligrosa explotación de la memoria histórica del Rif en favor de intereses ajenos a los propios rifeños.

Dada la naturaleza de estos expedientes, que se vinculan con los casos de cáncer que hasta el día de hoy siguen matando a muchos rifeños, la práctica vergonzosa del estado marroquí,  consiste en movilizar a la opinión pública rifeña para manifestar hostilidad contra España, señalando a este país vecino como el único responsable de lo ocurrido entre 1923 y 1927, agitando a la opinión publica rifeña cada vez que tiene necesidad, sin tomar en cuenta que el gobierno alauí fue un aliado clave del régimen colonial en la ejecución de este crimen. España no es la única responsable de dicho crimen; esto había sido señalado con anterioridad en una carta  dirigida al gobierno español sobre este tema.

El gobierno marroquí explota esta cuestión humanitaria en beneficio de sus propios fines, cargando toda la responsabilidad a España. El Movimiento 18 de Septiembre ve que esto es contrario a los hechos históricos y que está dirigido a servir exclusivamente a los propósitos políticos neocoloniales del estado alauí (=marroquí), que aún sigue ocupando la tierra rifeña, yendo en contra de los intereses de los propios rifeños. Queremos señalar que el desastre de la guerra química contra el Rif concierne exclusivamente a los rifeños, por lo cual, consideramos que el régimen marroquí no tiene autoridad moral para adjudicarse un reclamo que sólo el pueblo rifeño puede hacer, ya que el régimen marroquí participó también en la ejecución de este crimen.

Recientemente, algunos han intentado negar la existencia de este crimen, (nos referimos a una investigadora española y al ministro marroquí), aseverando la falta de relación entre los bombardeos químicos de los años veinte del siglo pasado y los casos de cáncer, enfermedad que sigue matando a los rifeños en la actualidad. Es así, que debido a la total ausencia de estudios científicos, se pretende negar la relación entre los bombardeos químicos y los numerosos casos de cáncer en el Rif. Este es un tema controversial y en nuestra opinión, primero deberían hacerse  los estudios científicos pertinentes para que a continuación, los rifeños desarrollen su propia visión y sus estrategias a seguir con respecto a este tema, ya que sólo corresponde a ellos definir cómo tratar la deuda histórica que la vecina España tiene con el Rif. Asimismo, corresponde a los rifeños todo lo relativo a las relaciones entre el Rif y España. El estado marroquí ha cometido continuamente diversos crímenes contra la población rifeña, y estos crímenes no son menores  que los ejecutados por aquellos que utilizaron gas tóxico en los años veinte. El régimen marroquí es una dictadura que utiliza los archivos sobre el bombardeo químico en el Rif para sus propios intereses, aumentando la tragedia en el Rif que aspira a la soberanía, a la libertad y la independencia plena.

Es nuestra intención hacer notar la gravedad que implica la utilización de dichos archivos en función de los intereses coloniales de Marruecos y en su volátil relación con España; queremos asegurarnos que estos archivos sirvan para establecer un diálogo tan sólo entre España y el Rif, especialmente entre las víctimas de cáncer y las familias que fueron víctimas de aquella atroz guerra. Se trata de un tema que abordamos con gran seriedad, ya que constituye una prioridad para nosotros los rifeños, antes que para cualquier otro. Somos una organización política que tiene como objetivo el llevar a la Independencia al Rif, y liberarlo de las garras del Gobierno marroquí.  De igual manera y en segundo lugar, deseamos establecer que la prioridad actual es volver a establecer la República del Rif, que será la garantía de la libertad, la garantía de la dignidad de los rifeños y la única forma en que ellos puedan ejercer sus derechos históricos. 

Es así que centramos nuestros esfuerzos en dicho objetivo, dirigiendo nuestros discursos a las organizaciones internacionales, que están construidos sobre los cimientos históricos, geográficos, económicos, políticos, lingüísticos, culturales… etc. del Rif. Estos elementos están vinculados, en gran parte, con la vecina España, en virtud de la historia y la geografía, por ello insistimos en que estos expedientes sean tratados a través de la relación histórica con este país vecino (es decir, el tema de los gases tóxicos; la participación rifeña en la guerra civil española; la colonización y el saqueo de la riqueza en ciertas etapas históricas). Será sólo a la luz de las relaciones rifeño-españolas que podremos crear un ambiente sano, seguro y permanente, así como un diálogo serio y responsable, teniendo en cuenta a ambas partes, de conformidad con los principios de buena vecindad. La aplicación de dichos principios podría mejorar en gran medida la relación entre nosotros y nuestros vecinos españoles, de acuerdo con las aspiraciones de ambos pueblos.

Movimiento 18 de septiembre por la independencia del Rif

En 20/05/2015