11:06 h. viernes, 22 de noviembre de 2024

De mis Fiestas de San Ginés (II)

DE AQUÍ  PARA ALLÁ Y LOS PREGONES

 |  20 de agosto de 2022 (08:14 h.)
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LORENZO LEMAUR

Pasaba el tiempo y las Fiestas de San Ginés seguían siendo para mi, como para los que vivíamos en Arrecife, y gran parte de quienes vivían en Lanzarote, unas fechas esperadas con mucha ilusión. Estrenar ropa seguía siendo un acontecimiento. Ya granditos, los cochitos chocones, las tómbolas y aquel señor que venía con la ruleta llena de atractivos regalos era un lugar de encuentro deseadamente obligado. Pero, para mi, el que más: las casetas de tiro con escopetas de balines o de tapones de corcho. Aunque todos fuimos sabiendo que las escopetas estaban todas cambaleteadas y que si apuntabas al blanco no dabas ni una.

Mi medalla de bronce en tiro en los Juegos de la Juventud de 1972 y mi experiencia como  cabo primero instructor de reclutas en la mili me valían de mucho. Como sabía que las escopetas estaban mal y que muchas tenían poca fuerza, me ponía primero detrás de los que probaban suerte a verles disparar. Me fijaba en las escopetas que tenían poca fuerza y en su desviación. Así, escogía una buena, hacia un primer tiro de calibración y ya luego apuntaba con el desvío observado y a romper palillos y ganar regalos que de antemano había ofrecido a mi acompañante. 

Con algún año más, además de que las casetas de tiro fueron menos, pasó a ser otra anhelada obligación sentarnos en un ventorrillo a comer carne de cochino en adobo o pulpos, siempre con sus correspondientes papas arrugadas y el mojo que a cada uno más gustara. También, antes, de niño, recuerdo ir como mis padres a los ventorrillos a comer tonina en adobo frita. El olor se percibía desde lejos. Es uno de los sabores que mi memoria guarda como más apetecible. 

La tonina es una variedad de delfín que llega a medir hasta tres metros y medio de largo, de barriga color blanco, dorso negro y flancos grises. Como todos los delfines, tiene el hocico prolongado, se desplaza en grupos pequeños cerca de la costa y se alimenta de peces. Hasta por lo menos mediados de los años 70 recuerdo verlas saltar frente al litoral de Arrecife, no muy lejos de la costa. Después, nada más he sabido de las toninas. Me imagino que en la actualidad deberá estar prohibido cazarlas o pescarlas.

DE AQUÍ PARA ALLÁ 

Mientras el tiempo pasaba, de la primera ubicación de la feria que conocí, delante de donde hoy está el Ayuntamiento y hasta la esquina de la calle Real; los cochitos, las tómbolas, las casetas de tiro y los ventorrillos se mudaron a la explanada de delante del Castillo de San Gabriel, cuando quitaron la fábrica del hielo.  Más tarde pasó al Parque Viejo (Ramírez Cerdá) y luego al Parque Nuevo (Islas Canarias). De esta última etapa recuerdo como si fuera ahora ver llegar un rancho de gente cuando acababa el fútbol o la luchada, que siempre se celebraba el día de la víspera.

Por cierto que, seguro que quienes tenemos más de 55 años, recordamos aquellos tremendos de Torneos de San Ginés de fútbol, con la participación de grandes equipos como el Castilla, el Valladolid, el Rayo Vallecana, el Éibar, el Atlético Funchal de Madeira. Pero los más populares fueron siempre el Tenerife y Unión Deportiva Las Palmas, que sin discusión es el equipo de fútbol que más afición ha llevado siempre al Estadio, que se llenaba. Lamentablemente todo eso se ha perdido. De muchos años para acá ni 500 espectadores van a ver el fútbol. Y eso que desde 1991 la Ciudad Deportiva Lanzarote cuenta con el primer campo de césped sintético de Canarias. También fue desde siempre apoteósica la luchada de San Ginés, que siembre se celebraba en la víspera. Sin duda uno de las actos más grandiosos y concurridos de las Fiestas. Para la ocasión se formaba un combinado local reforzado que se medía con los mejores equipos y luchadores de Canarias de la época. Pero, como he dicho, todo eso se ha ido perdiendo.

Y LOS PREGONES 

La página web "Los pregones de Arrecife", de los amigos Oscar Torres y Jesús Perdomo, nos documenta en que "en los años 50 y principios del 60 se realizaba un concurso para elegir el pregón de las Fiestas". Entonces, después de los pregonas de los años 11953 a 1956 de los que la web de Torres y Perdomo tiene publicado el texto pero con autor desconocido, el primer pregón de las Fiestas de San Ginés con autor registrado es el de Agustín de la Hoz en el año 1957.

El primer pregón de San Ginés al que recuerdo asistir fue al de Don Nicolás de Paiz, en la Casa de la Cultura Agustín de la Hoz, el de 1997. Antes andaba yo más centrado en otras cosas. Antes de ese 1997 habían pregonando las Fiestas de San Ginés insignes personas como Agustín de la Hoz en los años 1957, 1958, 1959 y 1963; Sebastián Sosa Barroso en 1974 y más tarde en 1992; Juan Marrero Portugués en el año 1976, Jesús María Godoy en 1977; Fernando Jiménez en 1979 y Guillermo Topham en 1980; Agustín Millares Cantero en 1982 y Pedro Guerra Cabrera en 1983.

Luego pregonaron las Fiestas crónicas insulares como el entonces muy joven Mario Alberto Perdomo en el año 1987, Pedro César Quintana en 1990 y Antonio Lorenzo Martín en 1994. También lo hicieron destacadas personalidades como Alfredo Herrera Piqué en el año 1984, Antonio Tejera Gaspar en 1986, Manuel Medina Ortega en 1988, Jerónimo Saavedra en 1989, Manuel Padorno en 1991 y José Antonio García Déniz en el año 2002. Luego, otros tres cronistas seguidos: Agustín Acosta en 1998, Andrés Pallares Padilla en 1999 y Félix Martín Hormiga en 2000.

Pero, el pregón que más impacto me ha causado fue el del catedrático lanzaroteño afincado en Tenerife, Manuel Torres Stinga, en el magnífico escenario del Charco de San Ginés. El suyo, en el año 2003, y el de las Fiestas del Pino de 2008 leído por la Catedrática de Literatura española de la ULPGC; Yolanda Arencibia Santana, en el que diseccionó la perla de Néstor Álamo: Caminito de Teror"; son los dos pregones, y más aún los actos culturales, que mi memoria guarda como joyas.

Muy entrañable, a la vez que altamente etnográficos fueron luego los pregones de insignes vecinos, aún no distinguidos como Hijos Predilectos o Hijos Adoptivo de Arrecife, como Sham Dayaram Indani en el año 2008, don Pedro Hernández Cerdeña en 2010 y Juan Rosa Perdomo en 2011. También pregonaron nuestras patronales Fiestas de San Ginés el popular exconcejal de fiestas Severiano García Hernández en el año 2001 y tres exalcaldes de la Ciudad como José Maria Espino en el año 2004, el malogrado Enrique Pérez  Parrilla en 2014 y la primera mujer alcaldesa de Arrecife, Elisabeth de León en 2017. 

En otra línea de pregoneros; en 2012 el Ayuntamiento designó para la ocasión a la Agrupación Folclórica Coros y Danzas Arrecife. Luego en 2018 pregonó las Fiestas la parranda Amigos de Portonaos. Fueron las dos primeras ocasiones en que las fiestas patronales fueron pregonadas por un colectivo. Igual ha sido en este año 2022 con el pregón de la Agrupación Folclórica Los Campesinos.