Presidente Pedro Sánchez
En estos días hemos visto como Pedro Sánchez, ha vendido en subasta pública en el Congreso de los Diputados, su alma al diablo. Nunca, a lo largo de la Historia conocida, pactar con el príncipe de las tinieblas, consumado jugador de ventajas, ha sido buen negocio. Todos vamos a perder, sin excepción.
Tenemos "ab initio", un Presidente débil, rehén de nacionalistas, independentistas y radicales, que van a aprovecharse y a exprimir una ocasión única e irrepetible. Todos vamos a perder con Pedro Sánchez, que es un Presidente débil, de oratoria hueca, que va a ceder en cuantos aspectos tenga que afrontar, con radicales que no van a negociar sino a exigir en una extorsión tras otra, a un Presidente cuyo único activo es su verborrea inacabable y su capacidad fotogénica.
El Presidente Kennedy declaró, que siempre se había rodeado de hombres más inteligentes que él. En éste caso, estamos en las antípodas de Kennedy, ante un Zapatero II, rodeado de lacayos y lacayas, de inútiles e inútilas, miembros y miembras, de trastos y trastas; de un hombre sin dignidad, que ha pactado en favor del enemigo. Estamos ante un esperpento público, un foto-Presidente por lotería y accidente, donde todos ya hemos perdido.
¿Expectativa de vida?¿Beneficio común y servicio público?
Un monstruo de cuatro cabezas con pies de barro, sentenciado el primer día.
Triste, pobre y esperpéntico equipaje de mano.
(*)
Ldo. Derecho, Máster Turismo y MBA