TENEMOS BAJA AUTOESTIMA
ASSOPRESS
El Rey entregaba, el pasado jueves, las acreditaciones a los nuevos embajadores honorarios de la Marca España; dos vascos, dos catalanes, dos gallegos, un valenciano y asociaciones que habían sido nominadas por el Foro de Marcas como distinción por su contribución a generar una imagen positiva de imagen de España, dentro y fuera de nuestras fronteras.
Tener una reputación positiva, competitiva, es imprescindible en un mercado global donde los países concurren utilizando los valores objetivos y los intangibles de su imagen.
Los empresarios que luchan por contratos en el exterior, saben que una buena imagen nacional es un activo, que contribuye a respaldar actuaciones, generar confianza, facilitar alianzas, traer inversiones, internacionalizar empresas, vender bienes y servicios, obtener financiaciones en mejores condiciones y más turistas.
En este contexto se debe entender la necesidad de una sensibilización sobre la importancia de la reputación y de resaltar los aspectos más proactivos de nuestro desarrollo económico, social, nivel de negocios, empresas y marcas.
Así lo ha entendido el proyecto MARCA ESPAÑA 2020, impulsado desde el Ministerio de Asuntos Exteriores, que trata de afianzar una imagen de España, como potencia económica y política, entre los primeros países del mundo. Se pretende resaltar las fortalezas de España en los ámbitos económicos, culturales, tecnológicos, ciencia, medicina, moda , gastronomía, ect.y con un efecto inducido de conocimiento para los propios españoles.
Los primeros documentos elaborados y preparados para amplia difusión, destacan por su objetividad, señalando datos y sin derivaciones propagandistas de carácter gubernamental o partidista. Como ejemplo de esa intención, valen algunas informaciones del siguiente tono:
-España es la cuarta mayor economía de la Zona Euro, quinta de la UE y decimotercera del mundo por el volumen del PIB. Es el undécimo inversor mundial y el segundo en Latinoamérica
- Es uno de los mercados más grandes de Europa, con 47 millones de consumidores, además de ser la tercera potencia mundial de turismo.
- En España están establecidas más de 8.000 empresas extranjeras que dan trabajo a 1.2 millones de personas.
-España es el séptimo mayor exportador de servicios del mundo y el cuarto de la UE.
-Las empresas españolas son líderes en diferentes sectores de elevado valor añadido, como infraestructuras, energías renovables, biotecnología, ferrocarril, y economía social.
-Tan solo Japón nos supera en esperanza de vida. La asistencia sanitaria es modélica a nivel internacional y tiene carácter gratuito y universal. Destaca por ser líder en el transplante de órganos.
-España es uno de los lugares del mundo más seguros y son escasas las armas en manos de particulares.
-La mayor corporación del mundo del sector textil, con más de 6.000 tiendas repartidas entre los cinco continentes es española .En el sector de infraestructuras, son españolas las tres primeras del mundo y dos de las principales entidades financieras a escala mundial son españolas, así como la primera empresa europea de telecomunicaciones.-
-500 millones de personas hablan español y es la lengua más demandada en los centros educativos.
Junto a estas referencias positivas, naturalmente podrían señalarse otras negativas, tales como figurar en los primeros lugares de fracaso escolar o en los índices de paro, y las malas puntuaciones en corrupción y transparencia.
También cabría destacar el déficit de autoestima como país, es decir la forma en que interpretamos nuestra historia y proyectamos nuestro futuro. Está constatado que los españoles se distinguen por la frecuencia con que manifiestan juicios negativos sobre su país. Ahora mismo es un tema redundante, expresando el cansancio, el hastío, la indignación por las políticas cainitas, por los separatismos, la falta de un proyecto nacional y más. Un escaso aprecio que no se compadecen con los hechos ni datos objetivos de lo que fue , y es, España.
Debiera sonar la alarma para acometer una nueva proyección de nuestros valores y dignidad, aunque solo sea para que las generaciones jóvenes contemplen a su país con mejores ojos que sus abuelos.