El primer y deseado objetivo ya está cumplido, cierto; disputará las eliminatorias que den opción a ese ascenso a la 1ª División que tanto añoran los seguidores amarillos. Pero no es menos cierto que la UD LAS PALMAS es ahora de todo menos un equipo que desprenda seguridad y confianza, primero consigo mismo y luego con el resto de "observadores" que desde siempre siguen y persiguen la actualidad del gigante amarillo.

El partido del sábado en Murcia ante un equipo, al que los despachos le había dado una nueva oportunidad para seguir luchando por la permanencia, fue todo un cúmulo de despropósitos de los de Sergio Lobera, en un encuentro donde los locales hicieron mucho más para conseguir la permanencia, como al final así fue, que la UD LAS PALMAS por imponerse y garantizar así de manera matemática esas eliminatorias de ascenso.

Una nueva y vergonzante derrota que casi deja el proyecto de Miguel Ángel Ramírez en la misma orilla de cualquier opción de luchar por el asalto a la categoría de élite de este fútbol español.

Perplejos y atónitos tuvieron que quedarse los seguidores de la UD LAS PALMAS viendo a través de la Televisión de Gran Canaria y Tenerife como el partido que había que seguir era el del Lugo contra la Ponferradina, donde los del Bierzo se quedaron tan sólo a un gol de cumplir su sueño de luchar por ascender a la vez de meter en una profunda pesadilla al histórico conjunto amarillo.

Ya no queda otra que mirar hacia delante, ahora llega todo un miura en el Almería, 3º en discordia en la clasificación que se presenta a priori como una potente locomotora. En frente nuestra UD LAS PALMAS, que en principio no las tiene todas consigo, pero que quizás esa "pobreza" mostrada en los últimos partidos se convierta en el revulsivo necesario para darle la vuelta a ese favoritismo con el que en principio cuenta el Almería que entrena Javi Gracia.

El Miercoles en el estadio de Gran Canaria se empieza a escribir las "páginas" de lo que puede ser un hito histórico para con la UD LAS PALMAS, su retorno al fútbol de élite dónde durante muchos años tuvo su "asiento" de preferencia.

En el mejor de los casos le quedan cuatro partidos a cara de perros; no cuenta a prioiri con las mejores cartas, pero como en toda partida no siempre gana el que tiene las más altas, sino el que sabe jugar de FORROS.