La falsa historia de la Conquista de Lanzarote
Alguien dijo una vez, "la Historia la escriben los vencedores". Pero matizando dicha frase, y adaptándonos al presente siglo XXI, podemos afirmar sin ninguna duda que "la Historia la escriben los que pueden controlar los medios de difusión" de la misma. Y desgraciadamente buena parte de la cultura de Canarias se basa en una "historia" muchas veces adulterada a conveniencia del mandamás de turno, y luego mantenida en el.tiempo en los llamados "libros de texto", que son una simple edulcoración de los textos originales.
En el caso de Lanzarote, todavía son muchos los que creen a pie juntillas, la "historia" de que la isla fue conquistada por el normando Jean de Béthencourt, "para honra de Dios y para mantenimiento y aumento de nuestra santa fe en las partes de Mediodía...", como reza la supuesta Crónica de aquellos hechos, Le canarien (el Canario). Sin embargo, la aparición de una copia de la Crónica real, que actualmente se encuentra en el Museo Británico de Londres, ha demostrado lo complejo de un "timo" que durante 406 años embaucó a muchos de nuestros más insignes historiadores. Un fraude que curiosamente aún se sigue editando "como algo verídico" en los libros de texto y en algunos de Historia de España.
La historia real de lo que ocurrió en Lanzarote hace 610 años, como luego explicaremos con argumentos, fue en resumen la siguiente: en julio de1402 llegaron a la isla dos socios, el normando Jean de Béthencourt y el potevino Gadifer de la Salle, en unión de 63 hijos de Francia. Apenas un mes después, Béthencourt marchó a Castilla, y no volvió a lanzarote hasta abril de 1404 (20 meses después). Y cuando retornó, la isla ya había sido conquistada por Gadifer... Más aún, la mayor parte de los normandos se rebelaron, provocando muertes, violaciones y captura de esclavos isleños. Huyendo finalmente a Castilla, donde fueron apresados. En la isla sólo quedó un normando, siendo el resto gascones, potevinos y bretones. Entonces, ¿Por qué los libros publican que Béthencourt y "sus normandos" conquistaron la isla?
Hoy sabemos que en realidad Béthencourt era un pirata, ladrón y conspirador contra su rey Carlos VI, que tuvo que huir de su país para escapar de la Justicia. Incluso le robó el patrimonio a su propia esposa, y se apoderó de la herencia de su único hermano... Y cuando consiguió el apoyo del rey de Castilla, no dudó en arrebatar los méritos de su socio Gadifer (verdadero conquistador) para hacerlos suyos. Sin embargo, la Crónica (elaborada en su mayor parte por dos religiosos que estuvieron durante la Conquista) relataba "los verdaderos hechos" ocurridos esos años, y el engañado Gadifer se preocupó de distribuir copias de la misma por las Cortes europeas.
Béthencourt, siguiendo su conducta delictiva, enajenó las islas (y sus posesiones normandas) en diferentes manos, creando un complejo entramado jurídico. Y a su muerte, su único heredero era su sobrino Jean V de Béthencourt. Pero claro, era heredero de ilusiones, porque todo lo que no estaba embargado era objeto de reclamación por parte de diferentes "propietarios". Y en medio de la más dura pobreza, llegó a sus manos una copia de la Crónica de Gadifer. Según publicó el célebre Catedrático e Historiador Alejandro Cioranescu, "Jean V lo manipuló (el manuscrito) para que pudiese servir de argumento jurídico en su favor: lo modificó de tal manera que el tío (Jean IV) apareciese como el único derecho habiente y el único conquistador y, naturalmente, hizo desaparecer la versión de Gadifer que poseía, con la esperanza de suprimir así cualquier posibilidad de sospecha o de oposición...".
Según apuntan los investigadores, esta "crónica manipulada" fue escrita directa o indirectamente por el propio Jean V, en 1490. Y durante 140 años sirvió como base para célebres cronistas como Abreu Galindo, Marín de Cubas y el propio Viera y Clavijo.
El que fuera Ministro de Propaganda del III Reich, Joseph Goebbels, llegó a decir que "quién miente una vez, miente dos veces". Y eso parece haber ocurrido entre los descendientes del normando. Así fue que en 1630, otro familiar de nombre Galien de Béthencourt, Consejero en el Parlamento de Rouen, creyendo hacer valer sus derechos sobre el Archipiélago publicó "su" versión sobre la Crónica de la Conquista de Lanzarote "por su antepasado", ilustrando su obra con numerosos dibujos que despertaron la imaginación de los lectores ávidos de aventuras. Y durante 266 años más se prolongó "el mito de Béthencourt".
Hasta que en 1888 fue adquirida por el Museo Británico de Londres una copia miniada de la verdadera Crónica, que el propio Gadifer le había entregado en 1419 al Duque de Borgoña. Documento que ha sido reconocido por todos los Historiadores hasta la fecha, como "la verdadera Crónica", mientras que el hasta entonces oficial es considerado "un fraude".
Lo que nadie se explica es que, 120 años después de haberse descubierto el documento, todavía la "historia" de Lanzarote sigue siendo la burda manipulación de la familia Béthencourt. Incluso algunos ayuntamientos de la isla (como Teguise en la Era Dimas), han llegado a celebrar "hermanamientos entre Lanzarote y Normandía", casi como alabanza de unos hechos que nunca llegaron a ocurrir. Algunos libros incluso aseguran que "Béthencourt fue el conquistador de Canarias" (teniendo en cuenta que la Conquista duró 94 años, Béthencourt debió ser hermano de Matusalén). Con lo cual queda bien claro, como dijimos en el artículo de la semana pasada, que la Historia de Lanzarote (y de Canarias) no le importa nada a nuestros políticos. Ni a los españoles (por motivos obvios) ni a los canarios (por ser medianeros).
Y la historia siempre seguirá siendo manipulada. La pasada, la actual y la futura...
AURELIANO MONTERO GONZÁLEZ