El dicho de que más vale tarde que nunca puede aplicarse, con razón, al reciente consenso alcanzado entre empresarios, sindicatos y Gobierno canario en la aprobación del texto base del Régimen Económico y Fiscal (REF) de Canarias. Aunque sea al final de una legislatura en la que los puntos de encuentro entre los tres interlocutores no ha sido todo lo extenso que podríamos desear, tenemos que felicitarnos de que hayamos sacado adelante un texto que atiende cuatro reivindicaciones irrenunciables de Comisiones Obreras Canarias y que reconoce la cohesión social como un principio básico del régimen económico.
En primer lugar, el nuevo REF condicionará las subvenciones públicas a la responsabilidad social de las empresas. No era posible seguir tolerando un régimen económico que permitía privatizar los beneficios obtenidos por medio de ayudas públicas, ayudas que, en definitiva, solo servían para engrosar las cuentas corrientes empresariales. Hemos conseguido que, a partir de ahora, esas subvenciones repercutan directamente en el bienestar social. Así, las empresas tendrán que comprometerse a que esas subvenciones se destinen a aspectos como la mejora de las condiciones laborales, el incremento de los sistemas de protección de riesgos laborales y la conservación del medio ambiente.
En segundo lugar, se recoge un Plan Integral de Empleo que no solo se orienta a mejorar la empleabilidad de las personas que están en paro o a dinamizar el mercado laboral para que sea más fácil acceder a los puestos de trabajo. Este Plan también atenderá las especiales circunstancias de los parados de larga duración, un colectivo de personas, en torno al 10% de la población, que debido a las condiciones del mercado laboral, su situación de permanente desempleo se constituye como un problema estructural de la economía canaria. El nuevo REF se compromete a articular las necesarias medidas de protección social para que garantizar a este colectivo unas condiciones mínimas de vida digna. Se cumple así nuestro objetivo de que la economía sirva a la sociedad y no a la inversa.
En tercer lugar, el Plan de Energías Renovables aprobado garantiza un nuevo modelo energético en el que el gas ya no tendrá una mención específica ni preferente. Con este modelo estaremos en mejores condiciones para avanzar hacia el ansiado cambio en nuestro modelo productivo. Las energías renovables, por las que apuesta Comisiones Obreras, no solo producen importantes beneficios medioambientales, sino que también reducen nuestra dependencia energética y son una importante fuente de nuevos puestos de trabajo cualificados.
En cuarto lugar, el nuevo REF va a posibilitar una sinergia efectiva entre todos los sectores productivos de Canarias. No era posible seguir aceptando que sectores como el hostelero se abastecieran de productos del exterior cuando muchos de ellos, y aún de mayor calidad, se producen en Canarias. Los sectores de la agricultura, la ganadería y la pesca, entre otros, se verán beneficiados por estas medidas que, quiero insistir en ello, puede repercutir muy favorablemente sobre la creación de puestos de trabajo.
Se trata, en definitiva, y gracias al esfuerzo sindical, de un REF con una importante dimensión social que, además, debe contribuir no solo al incremento del PIB de Canarias, sino, muy especialmente, al incremento de la calidad de lo que producimos.
Consideramos, por tanto, un avance el giro social que se deriva del acuerdo alcanzado por las partes –patronal, Gobierno y sindicatos—en la idea de que una mejor economía debe estar vinculada a mejores puestos de trabajo, mejor protección social y una mayor calidad de nuestro medio ambiente.