La ONG canaria Educanepal rescata a una niña de 12 años que trabajaba como "mano de obra barata" en Katmandú
La Organización No Gubernamental (ONG) canaria “Educanepal” ha rescatado en Nepal a Nirmala B.K., una niña de 12 años que estaba siendo “explotada laboralmente” en una fábrica del alfombras en las afueras de Katmandú.
La niña ha sido rescatada en una fábrica de alfombras, donde trabajaba, al igual que otros niños, como “mano de obra barata”.
El rescate se realizó el pasado viernes, y tras haber liberado a la niña, el equipo de Educanepal ha podido comprobar que la joven trabajaba en la fábrica de alfombras desde las cuatro de la mañana hasta las ocho de la tarde, por un salario que oscilaba entre los 10 y los 25 euros al mes, según lo estipulase el dueño, quién ofrecía a sus trabajadores tan sólo dos comidas al día.
“Las primeras semanas me sangraban las manos al tener que trabajar con hilos que me cortaban los dedos, por las noches lloraba pensando en mi hermana Kamala y por no tener a nadie cerca de mí”, ha manifestado Nirmala tras ser rescatada.
Para proceder al rescate ha sido fundamental el testimonio de su hermana Kamala, de 9 años, quién ha narrado al fundador y coordinador del proyecto de “Educanepal”, José María Díaz, donde se encontraba Nirmala.
La más joven reside desde hace apenas un mes en una de las casas de acogida que Educanepal tiene en el distrito de Makwanpur (Nepal), a la cual también ha sido trasladada su hermana Nirmala, ya que ambas vivían sin casa fija en una aldea próxima a una de las escuelas de Educanepal, tras sufrir la muerte de su padre a manos de las fuerzas armadas durante el conflicto maoísta y el abandono por parte de su madre.
Tanto Kamala como Nirmala son delits (intocables), por lo que sumergidas en la más absoluta pobreza apenas recibían algo de comida por parte de un tío y de la abuela.
“Apenas teníamos para comer, así que cuando me ofrecieron trabajar en la fábrica no me lo pensé mucho”, ha dicho Nirmala, quién ha explicado que llevaba años sin ir a la escuela y trabajando para poder alimentar a Kamala.
“En la fábrica donde se realizó el rescate habían como treinta niñas más de entre 7 y 16 años de edad, provenientes de varias aldeas remotas del Nepal rural”, ha denunciado José María Díaz.
“Pero sólo hemos podido rescatar a Nirmala, pues su tío nos facilitó una carta de autorización necesaria para convencer a los dueños de la fábrica”, y poderla liberar, ha lamentado el fundador de la ONG canaria.
“Denunciamos el hecho a la policía, pero nos dijeron que no podían hacer nada al no tener un centro donde poder acoger a los niños”, ha señalado el también coordinador de Educanepal.
Tras el rescate, Nirmala se ha reencontrado con Kamala, y ambas convivirán en la casa de acogida de Educanepal. Nirmala retomará también sus estudios en cuarto de primaria, y la ONG le pondrá una profesora de apoyo para que avance lo más pronto posible, con el fin de que pueda estudiar con las niñas de su edad.
“He perdido tres años de estudios y ahora no me queda más remedio que estudiar con niños muy pequeños, pero quiero aprovechar esta oportunidad y no tener que trabajar quince horas al día por un mísero salario”, ha manifestado la niña.
En este sentido, Díaz ha recordado que hay miles de niños que son explotados hoy en día en Nepal, y que muchos de ellos son niñas que acaban siendo prostituidas “aprovechándose de su inocencia, ignorancia y estado de vulnerabilidad al estar solas en un país donde una mujer sin familia o marido es presa rápida de los traficantes”.
Por ello, y para evitar que se atente contra los más indefensos nació, hace ya once años, la ONG canaria Educanepal, que lucha para prevenir el tráfico de niñas en el citado país asiático por medio de la escolarización.
Además, en estos años, la ONG ha conseguido poner en marcha dos casas de acogida para las niñas “más vulnerables al tráfico sexual y laboral”, que suelen ser las huérfanas, las niñas de la calle, o las que provienen de un entorno familiar donde son expuestas a abusos y violencia.