El portavoz parlamentario de Nueva Canarias (NC), Román Rodríguez, advirtió hoy que se abre camino, en el Parlamento, el modelo territorial desarrollista conservador de la minoría ciudadana, apadrinado por CC y secundado por el PP y la Agrupación Socialista Gomera (ASG). Rodríguez afirmó que la ponencia del Proyecto de Ley del Suelo ha situado al PSOE, Podemos y los nacionalistas de izquierdas en el bando contrario, en el de la “defensa del proyecto común de Canarias, reflejo de la mayoría de la calle”.

La primera reunión de la ponencia ha comenzado a analizar las 533 enmiendas parciales al PL del Suelo de Canarias, cuya complejidad, según NC, se mide por contener 408 artículos (distribuidos en 10 títulos acompañados previamente de un título preliminar que, a su vez, se divide en diferentes capítulos y secciones); 19 disposiciones adicionales, 23 transitorias, una derogatoria y siete disposiciones finales.

Román Rodríguez indicó que, a pesar del ambiente constructivo de la reunión, la complejidad de los contenidos de esta propuesta sólo permitió ver 13 artículos, que en sus aspectos técnicos contaron con el acuerdo de los ponentes.

El inicio de los trabajos posibilitó, según el portavoz de NC, comenzar a debatir uno de los temas más relevantes de esta iniciativa legislativa, las competencias autonómicas sobre el territorio y el medio ambiente. Un debate que, en su opinión, visualizó “las dos maneras contrapuestas de entender” Canarias.

Por un lado, el PSOE, Podemos y los nacionalistas de izquierdas que “defendemos el interés general, un proyecto común de Canarias y que representamos a la mayoría de la calle”. Enfrente, prosiguió, la visión “conservadora, la que apuesta por el fraccionamiento del gobierno del territorio y del medio ambiente además de la desregulación”, encabezado por CC, secundada por el PP y la ASG y que representan a la “minoría” aunque con más escaños, gracias al perverso sistema electoral.

Nueva Canarias y Podemos, según Román Rodríguez, “compartimos” que, además de la evaluación ambiental, la aprobación definitiva de los planes debe quedar en manos del Gobierno. Sin embargo, CC, PP y ASG impulsan el “fraccionamiento del gobierno del territorio y del medio ambiente” al traspasar estas decisiones al ámbito de las corporaciones locales, tal y como denunció.

El bloque conservador “se desentiende de las competencias autonómicas, de lo que dice el Estatuto que es nuestra responsabilidad común”, avisó el portavoz de los nacionalistas de izquierdas.