IUC rechaza privatizar AENA
Ramón Trujillo, coordinador de Izquierda Unida Canaria (IUC), expresa el rechazo de su formación a “privatizar AENA justo cuando empieza a dar beneficios, pues se confirma, una vez más, que los defensores de las privatizaciones quieren a las empresas en manos públicas cuando dan pérdidas y en manos privadas cuando dan beneficios. Quieren socializar las pérdidas y privatizar los beneficios”.
Desde IUC, se apunta que el “proceso de privatización del 49% de AENA evita que sus beneficios vayan a las necesitadas arcas públicas, incrementará la precariedad laboral en el sector, los precios de los servicios y la falta de control democrático. Seguramente, se verán beneficiadas empresas que han hecho donaciones a partidos privatizadores y que en el pasado exigieron a esos partidos despilfarrar en infraestructuras aeroportuarias para hacer negocios construyendo con dinero público lo que no hacía falta. Esto provocó el desprestigio de lo público y la exigencia de la gestión privada aeroportuaria”.
Trujillo señala que los aeropuertos “son infraestructuras estratégicas para nuestro país, y para Canarias en particular, y no deben está sometidas a la lógica del lucro privado, sino al interés público y al objetivo de su propia sostenibilidad económica”.
El coordinador de IUC denuncia que la “política aeroportuaria ha sido pasto de una corrupción legalizada que ha hecho que España, con menos población y menos renta por habitante que Alemania, duplique el número de aeropuertos de este último país”.
“En Canarias”, prosigue Trujillo, “estamos sufriendo las presiones de una minoría empresarial para que se construyan dos pistas aeroportuarias más, cuando las pistas de los aeropuertos canarios están tan sólo al 27.2% de su capacidad. Se exige despilfarrar en infraestructuras aeroportuarias y converger en niveles de despilfarro aeroportuario con otras comunidades autónomas pues, a pesar de todo, en el período 1985-2008, Canarias sólo recibió el 9.2% de la inversión total en aeropuertos, realizada por el Gobierno central, pese a haber contado con el 20.7% de los pasajeros del período. Hay un diferencial en despilfarro perjudicial para Canarias, que podría haber perdido importantes oportunidades de corrupción legalizada”.
En suma, “IUC quiere los aeropuertos en manos públicas, a ser posible en manos de representantes públicos que, a su vez, no estén en manos de grandes empresas, para garantizar derechos laborales, una adecuada política de tasas aeroportuarias, un precio adecuado de los servicios y que los beneficios vayan a las arcas públicas para financiar el bienestar de la gente y no a los bolsillos de los multimillonarios con capacidad de comprar el 49% de una AENA que, por cierto, cuando se vende se infravalora su precio”.