SOBRE LA GUERRA EN UCRANIA
Después de esperar más de dos meses una respuesta seria, de los Estados Unidos y sus países satélites, a las propuestas sobre seguridad colectiva en Europa, Rusia ha puesto en práctica las medidas técnico- militares que había anunciado y ha iniciado un ataque contra las fuerzas militares ucranianas.
De inmediato los incendiarios se han transmutado en bomberos y todos los medios de comunicación al servicio del imperialismo han entonado una canción muy popular en España hace 80 años: Rusia es culpable. También están invocando la defensa del Derecho frente a la política basada en la fuerza y así hemos escuchado al Presidente del Gobierno español decir que “las violaciones contra el Derecho Internacional no pueden quedar impunes”.
En estos graves momentos que vive Europa, el primer pensamiento de quienes, como AIRE, somos verdaderos demócratas es el de la solidaridad para las víctimas inocentes de este conflicto y, consecuentemente, el trabajar con todas nuestras fuerzas para que se detenga rápidamente la guerra.
En este sentido hay que tener presente la fundamental culpabilidad de quienes durante años han vulnerado el Derecho Internacional en Palestina, en Iraq, en Siria, en Libia, en Yemen, en el Sáhara Occidental y en un sinfín de sitios y ahora se rasgan las vestiduras. Ellos, los Estados Unidos y sus satélites de la OTAN, han ignorado todo intento de asegurar una paz colectiva en Europa y han incitado a los dirigentes ucranianos a rechazar los acuerdos de Minsk. Ahora los abandonan a su suerte, como hace unos meses abandonaron a sus “protegidos” afganos, pero las consecuencias más dañinas las recibirá, como siempre, la población civil más humilde.
Y esos daños no tardarán en repercutir en nosotros, a través de la escasez y encarecimiento de productos tan imprescindibles como los alimentos y los combustibles, agravando la actual inflación y empeorando el nivel de vida de las familias trabajadoras.
Para poner freno a esta espiral destructiva hay que poner en marcha plataformas democráticas unitarias que llamen a la movilización masiva, con los siguientes objetivos:
1.- Detención inmediata de las operaciones militares y regreso de todas las fuerzas a sus posiciones de partida.
2.- Puesta en marcha de los acuerdos de Minsk del 2.015 y neutralización de Ucrania dentro de sus fronteras de aquel momento.
3.- Cumplimiento de los compromisos adquiridos por Estados Unidos a raíz de la disolución del Pacto de Varsovia.
4.- Retirada inmediata de todas las fuerzas armadas españolas de los países bálticos, Rumania, Bulgaria y el mar Negro.
5.- Salida de España de la OTAN.
6.- NO A LA GUERRA.
La Izquierda, 25 de febrero de 2022 Comité Ejecutivo de Aires
aire-laizquierda.es
|