El Ayuntamiento aprobó, en sesión plenaria, de forma inicial la Ordenanza Municipal de Uso y Gestión del Litoral
El Pleno del Ayuntamiento Arrecife aprobó esta mañana de forma inicial, la Ordenanza Municipal de Uso y Gestión del Litoral capitalino. Un paso muy importante en la gestión municipal, que permitirá velar por el cuidado y el adecuado mantenimiento de la marina.
Según explicó la concejal de Medio Ambiente, Carmen Delgado, Arrecife cuenta por fin con un texto municipal que aúna las múltiples normativas que afectan a su marina. “Debido a la idiosincrasia de nuestro litoral hasta la fecha era prácticamente imposible determinar qué estaba permitido y qué no en este espacio, tanto para el usuario y como para los agentes de la Policía Local”, ha dicho la edil.
Hay que recordar que en ella interfieren distintas administraciones públicas, como: Autoridad Portuaria, Ministerio de Agricultura, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, Gobierno de Canarias, Plan Insular de Ordenación y Servicio Histórico de Patrimonio del Cabildo a parte del propio Ayuntamiento.
Por otro lado, el documento dota de una serie de normas de convivencia en el litoral tanto para los usuarios de las playas, como para los dueños de embarcaciones y otros elementos náuticos como el wind surf, las piraguas, motos de agua, etc. Elementos que coinciden con bañistas en zonas de baño, y que por lo tanto, deben adquirir unas normas de comportamiento respecto de estos últimos, los más vulnerables.
Estas normas de convivencia, están dictadas en la Ley de Costas, que además atribuye sobre el litoral escasas competencias directas a los municipios (responsabilizarse de la limpieza del Dominio Público Marítimo Terrestre y de la vigilancia y seguridad de los usuarios).
La mayor parte de la Ordenanza se centra así en cuestiones como: la forma de entrar y salir de la costa si usas embarcaciones o cualquiera de los objetos anteriormente citadas en espacios en los que hay bañistas; cómo comportarse respecto de la higiene y la salubridad del dominio público costero; cómo respetar las señales indicativas del estado del mar, respetar las indicaciones de las banderas en la playa o de los agentes de seguridad y de socorrismo costero.
El documento, también recoge la penalización de actos como: el abandono de residuos, el consumo de alcohol en la vía pública, el acto de fumar y abandonar colillas en la arena de la playa, hacer fuegos o acampar. Muchas de estas cuestiones están penalizadas por la ley de Costas y transferidas las competencias al ámbito municipal.
“Dada la importancia de este ámbito, desde el punto de vista ecosistémico, se introduce además la novedad de que las actividades que se pretendan desarrollar en el Dominio Público Marítimo Costero y que puedan repercutir en el entorno, deberán acompañarse previa a su autorización de un informe medio ambiental”, ha añadido la edil.
Se trata de actividades tales como mercadillos, escenarios, conciertos y cualesquiera que utilice la lámina de agua o contemple la generación de residuos que puedan acabar en la lámina de agua o en la ribera costera.