¿Tienes ampollas y picor sin causa aparente? Puede ser dishidrosis palmar

La dishidrosis palmar inicia su presencia con picazón en la piel y la aparición de ampollas que contienen líquido. Lo cierto es que, cuando las ampollas son de muy reducido tamaño es difícil diferenciar la presencia de líquido pero la continuación del proceso de la afección puede ser determinante para un diagnóstico acertado. Estas ampollas suelen ser de pequeño tamaño y se agrupan en racimos que suelen tornar en la fusión de ampollas pequeñas conformando otras mucho mayores.

Tras el secado natural de las ampollas días o semanas después, el proceso continúa con la descamación de la piel en la zona afectada. Es común presentar un engrosamiento de la piel con gran sequedad en la zona y aparición de grietas que dan lugar a la caída de la dermis en la zona. Es frecuente que este se curse con dolor o molestias y elevada sensibilidad. La piel se mantiene enrojecida durante un tiempo y va curando con lentitud.


En la mayoría de los casos, la aparición de nuevas ampollas llega antes de la curación de las anteriores por lo que se encadenan brotes y la afección va tornándose más grave.

Las zonas en las que se produce la dishidrosis palmar o pomfólix son las palmas de las manos y la zona lateral de los dedos aunque, en ocasiones, también se ven casos de dishidrosis plantar que ocurre de igual modo en la planta de los pies.


¿Cuáles son las causas?


La dishidrosis palmar es una enfermedad idiopática y, por tanto, no se conocen las causas específicas que llevan a su aparición. Sin embargo, sí se conocen ciertos factores de riesgo que aumentan las probabilidades de padecer esta dolencia.

  • Alergias. Las personas con alergias respiratorias pueden padecer esta enfermedad de forma estacional coincidiendo con la época de máxima afección alérgica.
  • Exposición a ciertos metales y químicos.
  • Estrés excesivo. Ya sea de carácter emocional o físico, está demostrado que en los momentos de mayor estrés se agravan los síntomas.
  • Dermatitis atópica y fiebre del heno. Entre otras enfermedades, las dos mencionadas suelen asociarse a la aparición de dishidrosis palmar.


¿Existe tratamiento?


Es difícil establecer un tratamiento definitivo para una enfermedad sin causa conocida. Sin embargo, sí se pueden tomar ciertas medidas de cuidado de la piel y reducir los síntomas con la aplicación de ciertos productos.

La reducción del estrés es una de las formas más eficaces para la eliminación de este eczema. Aumentar el tiempo de ocio saliendo a pasear o a hacer deporte, jugar a juegos para alejar la mente de los problemas o tomar unas vacaciones son algunos de los consejos más útiles para reducir los síntomas e, incluso, eliminar por completo el problema.

Por otro lado, para proteger la piel de elementos agresivos es muy recomendable evitar químicos y detergentes, así como apostar por la limpieza suave con jabón para pieles sensibles o geles formulados para los bebés. Usar guantes y aplicarse de forma regular productos hidratantes sin aditivos químicos también es esencial para lograr un buen resultado.